Ulquiorra. Me tienes Miedo (pregunto monotamente)
Orihime. No te tengo miedo (dijo esas palabras sin vacilación, mas sin embargo con una leve tristeza en sus ojos)
Ulquiorra. Ya veo
Esas fueron las ultimas palabras del cuarto espada. Su siguiente r...
¿Cuál es tu mayor deseo? ,Pregunto el ente de cabello celeste, casi plateado delante de Ulquiorra mientras sostenía una copa dorada en sus manos
Ulquiorra sin vacilación Respondió. --Quiero aprender de los humanos, todo tipo de cosas, quiero saber como se sienten, a pesar de que son una raza inferior, ellos poseen algo que yo no--
??????. Entonces te are renacer como un humano, pero perderás tus poderes y tus recuerdos
Ulquiorra. Si voy a renacer no hay necesidad de que los tenga
Después de esas palabras el ser delante de el extendió su mano, y al hacerlo un circulo mágico que brillaba de color azul apareció debajo de Ulquiorra
??????. Bien, espero que encuentres lo que busques AVENGER
Todo lo que Ulquiorra Sintió después de eso fue un calor que envolvía todo su cuerpo. Ulquiorra cada segundo que pasaba iba quedando inconsciente hasta que quedo dormido y lo ultimo que pudo ver fue una luz al final de un túnel que parecía infinito. Al abrir los ojos lentamente lo único que pudo ver era una mujer que lo cargaba en brazos tan cuidadosa y gentilmente como si fuera la cosa mas frágil del mundo, para Ulquiorra parecía muy feliz a pesar de estar llorando. Tal vez era por que hasta ahora le avía rendido cuentas a dos personas poderosas que pudo sentir que la mujer que estaba viendo con sus ojos era superior a el, aunque el porque, no lo sabia
Había pasado no mas de una hora desde que la mujer dio a luz, cuando el espada vio como se habría la puerta nuevamente para ver a un hombre de Cabello rubio que estaba muy agitado y sudado, parecía a ver corrido mucho ya que exhalaba bocanadas de aire para tranquilizarse, abrió la puerta de la habitación donde este se encontraba. Los ojos del hombre escanearon a la mujer y luego su mirada se fijo en el
Isanari. E.ese es (tartamudeando)
Karane. Si, el es tu hijo. Dijo la mujer con una sonrisa resplandeciente dedicada al Bebé en sus brazos
Jajajajajajja, si al fin soy padre, el hombre cargo al Bebé en sus brazos y al igual que la madre este parecía tener los ojos llorosos, pero mas que dolor era de felicidad pura, para el Ex Espada era una vista muy extraña y desconcertante, después de todo como alguien podría estar feliz mientras llora, podría comprender que alguien llorara por dolor o por tristeza, pero nunca pensó que también se aplicaba a la felicidad
Al fin después de 9 meses, que parecieron eternos al fin estas aquí. Estas palabras fueron dedicadas al Ex Espada de parte del que de ahora en adelante seria su Padre
Isanari. Bien pequeño, bien venido a la familia mi querido Futarou