Han pasado ya tres horas con 48 minutos y 12 segundos, me he puesto un poco de blush y un toquesito de lipstick que hace juego con mi vestido rosa. Mis padres aún no han vuelto pero se que cuando lo hagan seré la envidia de mis amigas... si todas ellas... porque obviamente tengo... la lista es larga.
Escucho un ruido familiar, es la puerta, así que con todas las fuerzas que poseo volteó la vista de mi espejo, gruño, pues eso es insoportable, si alguien es tan bella como yo hay que aprovechar.
Finalmente bajo la escalera para ir con mis papis, quienes... sorpresa, sorpresa, tienen mi regalo. Es tan sorprendente.
Me emocioné, demasiado, así que tomé el regalo con rápidez para que no vieran mi enorme sonrisa ya que se me arrugaría el cutis ,y nadie debe ver eso, y menos a mi TAN temprana edad.
Llegué a mi habitación y me senté en el piso.
-Lalalalala lalalala Lalalalala tonight we gon' be it on the floor - Canto, pero esta vez, en voz alta.
Preparé mis manos y mi mente para lo que sea que pudiese haber ahí dentro, ojalá sea un poni, en serio deseo que sea un poni.
Cruzo los dedos para que sea un poni.
¡Oh! ¡sorpresa sorpresa!, no es un poni, es algo más perfecto, claro, más que yo no, pero más que un poni si. Nada podría ser más perfecto que yo, ni siquiera dos ponis.
Contemplo mi regalo algunos instantes, nunca en mis seis años de vida había pasado más de un instante contemplando algo que no fuese mi reflejo. Es un momento mágico. Creo que... En serio siento que... ¡LO AMO!
Ahora debo averiguar qué es.
Volví a bajar, esta vez con mi nuevo y muy raro amigo... O amiga... Es azul, creo que es niño aunque esta medio chillón, ya luego lo averiguare.
-¡Papi! ¡Papito! ¿Qué es esto?
Mi papi pone los ojos en blanco y cara de frustración. Curiosa palabra, no se que significa, pero la usan mucho mis amigas populares... que obviamente tengo, como ya dije anteriormente.
- Es un cello. -Un cello de juguete. Estúpida.
-¡CELLO! -Exclamé. -¡Un hermoso cello!- Volví a exclamar. -¡ Y de juguete!, Eres tan hermoso (no tanto como yo,claro) mereces un nombre igual de hermoso, te llamaré... ¡CELLO!
