SIEMPRE EN MI MENTE [LUCEMOND]

Dame Atención

Era costumbre para Aemond ir a entrenar por las mañanas, ya que a esa hora su publico mas querido, estaria esperando por el, como era de costumbre desde hace mucho tiempo, cuando por poco su sobrino casi le saca el ojo, le hubiera gustado decir que lo odio por ello, pero la realidad fue muy diferente, Lucerys Valeryon su sobrino, fue tan insistente en que el le perdonara que no escatimó en esfuerzos, tiempo e inclusive intentos, por mucho que lo rechazara, alejara, gritara o incluso insultara, el niño seguia intentandolo, hasta que llego a un punto en el que si no tenia al morocho merodeando a su alrededor todos en el castillo, que osara cruzarse siquiera en su camino pagaria su mal humor, el niño se habia ganado su perdon y no solo eso, si no también su corazón, muy a pesar de su madre, que le recriminaba que cuando dejara de jugar con el bastardo de su media hermana, la verdad no me podria importar menos, los estupidas disputas entre familia, a menos que eso involucre a mi tesoro mas grande y mi ser mas querido, mi pequeño Luke!

Woooow tío te he dicho lo genial que te vez cuando entrenas?-dijo un joven morocho sentado cerca del lugar de entrenamiento

Si, me lo haz dicho pequeño, creo que una docena de veces, y veo que aun no te cansas- le dice al castañito acompañando sus palabras con una pequeña sonrisa

Este ultimo se acerca a su sobrino, lo jala de un brazo , no muy fuerte, solo lo suficiente para acercarlo a su cuerpo y abrazarlo

Luke te eh dicho lo mucho que me encanta tu olor? Es delicioso-dijo para luego hundir su nariz en el espacio entre el cuello y el hombro

Tio Aemond, me haces cosquillas cuando haces eso- dice con risitas melodiosas para el oido de Aemond

Algun día espero provocar mas en ti, que solo cosquillas- dicho eso su sobrino se separa un poco para verle mejor con una expresión adorablemente confundida

A que te refieres? No entiendo muy bien lo que me haz dicho- dice esperando impaciente una respuesta de su tío

Solo digo que estoy emocionado por que creescamos, cuando eso pase entenderas lo que he dicho, asi que solo recuerda cada palabra, para que en un futuro lo comprendas y aceptes- dijo a su sobrino dandole un abrazo seguido de un beso el la mejilla

Asi fue como esa mañana, se convirtió en uno de los mejores días para Aemond y el pequeño Luke, aun que el mas joven tuviera su carita completamente sonrojada, y su tio se burlara de el por ello, pero aun asi, sentia que era reconfortante escuchar y ver esa hermosa sonrisa de media luna en el precioso rostro de su tío Aemond.