Mi tierno Alfa╔ℬinᏇoo╗

09

—¿Estás bromeando conmigo? —pregunto MoonBin con el ceño fruncido.

JinWoo, que hasta ese momento se mantenía utilizando a su novio como escudo, nego varias veces con la cabeza. Nadie le creería si dijera que ese chico daba muchísimo miedo estando enojado.

—De todas formas ¿No es deber del mismo DongMin decirte eso? No es culpa mía.

—Claro, porque DongMin va a venir a decirme: "Hola Bin, te invito a mi fiesta sorpresa", claro, tiene mucha lógica.

MyungJoon suspiro con cansancio ante la pelea tan infantil que se estaba desarrollando en frente suyo, así que con la paciencia por el piso agarro a los dos por el pelo.

—Sera mejor que escuchen con mucha atención, en primer lugar MoonBin tiene razón, es una fiesta sorpresa, es obvio que DongMin no va a saberlo ¿Cómo podría llamarse fiesta sorpresa sino? Y MoonBin, no te dijimos nada porque en estos días fue casi imposible contactar con vos, ya hasta parecía que queríamos hablar con una superestrella o algo así, solo faltaba que salga un manager de la nada diciendo que tu agenda estaba muy ocupada.

Los dos hicieron una mueca de dolor y asintieron con la cabeza, sin querer decir algo más que podría hacer enfadar al omega.

El plan era el siguiente, ya estaba todo listo para la fiesta que darían en la casa de MinHyuk, solo hacía falta alguien que distraiga al cumpleañero y ese era MoonBin. Todos se reunirían en casa del alfa a eso de las 7 de la tarde, así que MoonBin tenía todas esas horas para darle un regalo más personal a su futuro novio.

—¿Ya tenes en mente lo que le vas a dar? —pregunto JinWoo, una vez se recupero del tirón de pelo que recibió por parte de su novio.

—Claro que sí.

—¿Entonces ya sabías que el cumpleaños de Minnie es mañana? —intervino MyungJoon.

—Sí ¿Qué clase de futuro novio seria si no lo supiera?

—Te ves bastante seguro de que van a ser novios.

—Lo estoy, le hice un amarre —bromeo, ganando un golpe en la cabeza por parte del mayor del grupo —esta bien, esta bien, la violencia era innecesaria ¿Sabías? Lo dije porque me di cuenta que le gusto de la misma manera que me gusta él. Estoy intentando ser más positivo.

—Eso es bueno primito, hacen bonita pareja. Aunque claro, no tanto como nosotros.

MoonBin rodo los ojos y después de asegurar que irían con DongMin a casa de MinHyuk, los dos mayores se fueron, dejando solo al alfa que se dejo caer rendido en la cama. Estaba nervioso, no solo porque no estaba seguro de si el regalo le iba a gustar al omega, sino que había decidido que ese mismo día le pediría ser su novio. Los dos se gustaban, eso había quedado más que claro con las frases bien directas que decía el omega, así que ¿Por qué esperar más tiempo? Aún así, su mente le hacía pasar un mal rato, creyendo que podía ser rechazado por varias razones: ya sea porque DongMin se dio cuenta que quería un alfa "de verdad", porque no quería nada formal, o incluso una dramática escena en donde los padres del chico interrumpian en el momento justo, diciendo que no querían que su preciado hijo saliera con un bueno para nada. Al parecer tenía que dejar de acompañar a su madre a ver la novela de las tardes.

Salió de sus pensamientos cuando escucho la puerta ser golpeada, así que se levanto para abrirla.

—¿Papá? —pregunto confundido —¿Pasa algo?

—Venía a ver si preparaste tus maletas.

—¿Mis qué...?

—Tus maletas ¿No recuerdas que hoy nos vamos a casa de tu tía? Hablamos de eso hace una semana.

—Pero papá yo no...

—Un momento —lo interrumpió, llevando una mano hasta sus labios en señal de que haga silencio.

Ese cambio de planes tan repentino lo dejo confundido, no recordaba para nada haber escuchado sobre ir a casa de su tía ¿Cómo era eso de que habían hablado hace una semana? Lo peor era que no le pudo decir nada a su padre, ya que este seguía con su llamada, y sin prestar atención a lo que tenía que decirle se fue.

Todavía tenía su segunda opción, su madre, así que sin esperar más tiempo fue a la sala, en donde la encontró sentada en el sofá mandándole mensajes a quien sabe que persona, tal vez a su tía.

—Mamá, ¿Podemos hablar un rato?

—Claro que sí, Bin, ¿Qué pasa?

—Yo... Es sobre la visita a casa de la tía.

—Oh, sí ¿Tenes tus maletas listas? —lo interrumpió, con una emoción que ni se molesto en ocultar —tu tía esta emocionada por volver a verte, se siente muy mal por lo ocurrido... Ese día, así que ahora pueden hablar y resolver todo ¿No te parece? Si charlan tranquilos, estoy seguro de que pueden resolver todo.

—Pero mañana yo...

—¿Qué pasa? ¿Tenes algo que hacer mañana?

Su expresión paso a ser desilucionada en cuestión de segundos y MoonBin no pudo decir nada. Desde ese día su madre y su tía casi ni pasaban tiempo juntas, lo que hacía que se sienta culpable, al parecer había separado a la familia por algo que no involucraba a los demás, tal vez lo mejor era ir para arreglar las cosas de una vez, no podía esperar a que pase un año para eso.

—No, solo que estoy un poco nervioso, eso es todo.

—Oh, cariño, todo va a salir bien. No te preocupes.

—Eso espero, bueno... Voy a terminar mi maleta, por cierto, ¿Cuánto tiempo nos vamos a quedar?

—Dos semanas, se acerca el cumpleaños de tu primo y debemos estar ahí.

A MoonBin le pareció ridículo quedarse tanto tiempo en casa de su tía, pero no dijo nada más y regreso a su habitación a preparar la maleta.

Fue a las dos de la tarde cuando se pusieron en marcha, e inevitablemente pasaron en frente de la casa de DongMin, quien se encontraba saliendo de su casa. Al verlo, el omega lo saludo con una sonrisa, pero él giro la cabeza fingiendo que no lo había visto ¿Cómo le decía que no iba a estar en su cumpleaños? Todo lo que había preparado para ese día estaba arruinando, tampoco podía quejarse con sus padres porque: en primer lugar, él nunca les había hablado de DongMin, excepto a su madre y fue una sola vez, en segundo lugar, había sido él quien decidió quedarse callado por la culpa que tenía al sentir que estaba separando a las hermanas.

Para empeorar las cosas recibió un mensaje de MyungJoon, recordándole que debía llevar puntual a su amigo a la casa de MinHyuk. Le respondió diciendo que surgió una salida a "última hora" y que no iba a estar al día siguiente y apagó el celular, sin ganas de responder los mensajes que seguro le llegarían pidiendo explicaciones. A la única persona que debía darle explicaciones, en su opinión, era a su chico, y eso haría, al menos cuando lleguen a casa de su tía, se alejaría un poco para poder hablar con él sin interrupciones.

Desde ahora les prometo que no voy a prometer nada. Fin.

Y acá esta el nuevo capítulo, con drama sacado de las piedras, ahre. Nah, mentira... Más o menos, habían quedado un par de cositas sin arreglar, así que aquí estamos.