Pesadilla

Capitulo 1

-Ring ring- sonó el despertador a las 6:20 como siempre, con el mismo ruido que me molesta oírlo cada vez más.

Como todos los días, me bañé, desayune y me subí al coche para dirigirme a la escuela. Durante el camino pude notar que mi mamá estaba un poco estresada ya que faltaban sólo 5 minutos para que cierren las puertas de la escuela.

Pero por fin llegamos. Al primero que salude fue a mi mejor amigo, Jack. Somos mejores amigos desde casi tercero de primaria.
Jack era un niño de mi tamaño (1.65m) y de 13 años; al igual que yo. Tenía el cabello de color negro intenso y tenía un gesto un poco serio, pero en realidad era una de esas personas divertidas que siempre te saca una sonrisa y podías confiar en el siempre.También era un poco distraído en las clases, pero hacía sus milagros en los exámenes.

-Hola Jason ¿Cómo estás?- Me dijo

-Bien, gracias ¿Oye, tu cuando vas a hacer tu examen de matemáticas ?

-El jueves, ¿ Por que la curiosidad?-

-Nada más-

Al poco rato mi amiga, Jennifer, me preguntó angustiada si teníamos tarea, lo cual me pareció muy extraño ya que ella era ese tipo de personas que jamás preguntaba sobre esas cosas, lo cual significa que es una niña que saca buenas notas en sus exámenes.

-Que yo recuerde no, pero ... ahhhhhh, bueno, solo era acabar un trabajo para quienes no lo habían hecho- le conteste pensativo, queriendo acordarme del final de una pesadilla que tuve.

-¿Estas bien?- Me preguntó curiosa, por la extraña manera en que le había contestado.

-Si estoy bien, sólo trataba de recordar...-

-¡Silencio ustedes dos!- Nos gritó la maestra de mala gana.

-Perdón maestra- Dijimos ambos al mismo tiempo.

Después de unos cuantos minutos, cuando Jennifer y yo pudimos notar que la maestra estaba distraída, Jennifer me dio un pedazo de papel arrancado y un poco arrugado que decía: "En la salida platicamos, ¿Esta bien Jason?". Y yo le conteste dentro del pedazo de papel en el cual ella había escrito, que me parecía bien.

Sobre Jennifer ... es una niña de 1.62 m. aproximadamente y de 13 años, con cabello de color castaño. Es de ese tipo de personas que les gusta ayudar a los demás y no les gusta ofender a nadie.

Una vez en la salida, mientras Jennifer y yo esperábamos a nuestras mamás para que nos recogieran, empezamos a hablar sobre tarea y exámenes, pero sobre todo de la pesadilla que tuve, ya que era lo que más le interesaba a Jennifer.

- ¿Ahora si me cuentas de lo que estabas tratando de recordar en la clase de biología?-

-Bueno, lo que estaba tratando de recordar en clase de biología era el final de una pesadilla que trataba de ... -

- ¡Pip pip!- Era mi mamá tocando el claxon del coche anunciándome que me tenía que ir.

-Cuéntame rápido- Me dijo Jennifer

-Perdón Jennifer, te lo cuento mejor otro día que lo sueñe y me acuerde mejor - Le conteste mientras agarraba mi mochila.

-¡Maldición!- Dijo ella entré susurros.

-Nos vemos mañana Jennifer- Le dije ya a unos cuantos metros del coche.

Ya a un metro del coche mi mamá me grito: "hola mi bebe, ¿Cómo te fue en la escuela?".

- ¡Mamá! ¡No grites, que te va a escuchar toda la escuela! - Le dije en voz baja por la misma razón: para que nadie me escuchara.

Durante el camino dentro del coche, mi mamá me pregunto lo de siempre: ¿Cómo me fue en la escuela?, ¿Si me dejaron tarea?, ya ustedes se darán una idea. Y yo le pregunte a ella lo de siempre: ¿Qué hizo mientras yo estaba en la escuela?, ¿Qué vamos a comer?, etc...
Pero hubo una pregunta que sobresalió en la platica, la cual la hizo mi mamá, y era: "¿Ya tienes pareja para el baile que es en dos semanas?".
Y ya ustedes sabrán que le conteste: no. No me interesaba demasiado tener pareja para el baile; pero para ella era la mayor preocupación que no tenga pareja para el baile, y supongo que también para mi papá.

Los martes, los jueves y los sábados tenía clase de natación, así que ese día (martes) tenía que preocuparme sólo por no comer demasiado para ir ligero a la clase, o eso según mi mamá.

Ya una vez en la clase de natación, empece a nadar un estilo llamado "crol". El profesor para ese entonces nos había puesto a nadar quinientos metros de este estilo.
Pero algo muy, muy extraño pasó mientras nadaba.
Mientras nadaba una voz extraña sonaba dentro de mi cabeza, era una voz que parecía venir de un adulto que me susurraba en el oído.
Lo que decía la voz no se podía entender y a la vez hacia un tipo de eco dentro de mi cabeza, lo cual dificultaba más entenderla.
Pero llego un momento que se le entendió a la perfección lo que decía. Y lo que dijo se me hizo raro, pero a la vez escalofriante.
Lo que dijo fue: "En diez días..."