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Sus pies estaban quietos sobre la mesa, aplastaba uno de sus cuadernos, específicamente el de lenguaje pero poco le importaba, de todas maneras no escribía en clases, tampoco prestaba atención.

Era uno de los estudiantes más desordenados y con peor promedio de la clase pero aun así se las arreglaba para pasar el año, nadie sabe como, tenía sus métodos y preferían no justificarlo, traer de malas a Tord larrskin era una de las peores cosas que te podrían pasar en tu vida.

—Heyy cuernitos!
Oh otra vez patryk, esperaba que tuviera algo interesante que decir esta vez.

—Ayer me junté con ella y sabes que hicimos?
Le empujo el hombro ansioso pero apenas Tord escuchó "ella" supo que iba a ser otra de esas conversaciones en las que pat se queda hablando horas de sus intereses, y lo dejaba de lado.

—Nos acostamos y dios! no entiendo como no quieres hacerlo con ella, es increíble, vieras como le rebotaban los pechos, es un desastre.

El comunista giró su rostro lentamanete hasta encontrarse con su amigo "el pollos" frente a frente, quería que se callara, que cerrara la maldita boca, iba a volverse loco si seguía hablando de esa mujer.
—Te vez raro hoy, todo bien? No as querido coquetear con ninguna chica, eso es inusual en ti.

—Sabes pat creo que canse de traer tantas locas a mi vida, soy como un imán.
Suspiro intentando calmarse y volteó hacia el techo perdido mientras su lengua se movía dentro de su mandíbula buscando la manera de salir.

—Las estupidas se enamoran y luego no se como deshacerme de ellas, me siguen de aquí para allá todo el tiempo, me escriben y ya me arto contestar el celular.
Su lengua escapó de entre sus dientes blancos y perfectos demostrando disgusto ante las palabras de su compañero.

Uno quería conversar sobre cosas nuevas mientras que el otro aun seguía en el pasado haciendo las mismas cosas que a Tord alguna vez le emocionaron y llenaron su vida de aventuras con personas distintas y que ahora no a vuelto a ver.

4pm

—No entiendo como puedes pasar todo el día allí pegado, cada vez que te veo o estás escuchando música o estás escribiendo, tienes una novia necesitada o algo así?
Pregunto el noruego mirándo con atención las yemas de los dedos del chico moverse y presionar las teclas de su celular rápidamente, parecía estar acostumbrado a escribir.

—No es de tu incumbencia cuernos.
Dijo el de cuencas sin dedicarle una sola mirada a Tord, haciéndole sentir frustrado, se sentía invisible cuando hablaba con el, como si estuviera pintado a su lado, tal vez así era.

—Venga deja el celular un rato y hablemos, te veo siempre en esta parada, donde vives?
El británico dejó de teclear de golpe, poniendo nervioso a Tord, acaso había dicho algo malo? Que haría ahora? Vio como apago el celular sin expresión y lo metio a su bolsillo derecho, acción que sorprendió a el extranjero, era la primera vez que dejaba el celular cuando el estaba a su lado.

—Esa es una pregunta muy invasiva sabes?
Respondió el britanico quien giro su rostro y por primera vez miró a quien tenía a su lado, miró a Tord, el primer contacto después de dias de estar hablando y molestándose entre ellos.

—Este... perdón.
No supo que decir o cómo reaccionar, extrañamente se había puesto nervioso con la mirada del joven, sus cuencas le hacían sentir consquilleos al no saber hacia donde estaban viendo exactamente, era un rompecabezas que el de piel tostada intentaba armar.

—Olvida donde vives, puedo saber tu nombre?
Una sonrisa embobada se formó en los labios de larrs casi al instante, una sonrisa sincera, tan tranquila que el de ojeras entendió a la perfección y se la devolvió con una risa corta mientras alzaba su ceja derecha extrañado.

—Vaya que eres raro, mi nombre es thomas.
Respondio riendo de ver al contrario casi inmóvil, le causaba gracia su reacción.

—Thomas... tu risa es linda.
Las risitas que adornaban el ambiente desaparecieron de golpe mientras un rubor fuerte crecía en las mejillas de tom y la sonrisa embobada de larrson desapareció de golpe.

-dritt...

4pm -tordtom Donde viven las historias. Descúbrelo ahora