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Luego de clases no sabia que hacer.

Tenía miedo pero tenía que confrontar al tipo enfermo quien escribía cartas y me enviaba regalos.

Cuando salí de la escuela me dirigí hacia la cafetería, por suerte habían muchas personas a esta hora, no podría pasar nada malo.

Entre y vi una mesa al lado de una ventana en un rincón, llevaba lentes y cabello negro, supuse que era el y me senté.

— Nos volvemos a ver, Giu.— El tipo sonrió de una manera muy desagradable de ver, parecía que no tenía intenciones buenas.

— ¿Quien eres? ¿Y que quieres de mi?

El tipo río.— Vamos linda, tu sabes quien soy.. ¿No leíste la carta de la semana pasada?— Estaba jugueteando con mis dedos y estaba sudando, este tipo sabía cosas sobre mi familia.— Escuché que estabas hablando sobre mi con tu preciada hermana.— me miró fijamente.

Me asuste y estaba temblando, de pronto vino la mecera.

El ordenó un café mientras yo aun estaba callada.— ¿Porque haces esto?

— Por amor.— Dijo fríamente.

Me quedé congelada hasta que no pide soportarlo y le lance una cachetada, su cachete estaba roja y no me miraba a los ojos como hace unos momentos.

— ¡NO TE ACERQUES A MI FAMILIA, MALDITO FENOMENO! ¡ALEJATE DE MI!

Salí corriendo del local lo más rápido que pude, llegué a casa y abrí la puerta de mi departamento.

Estaba desordenado, lo cual era raro.

Pensé que posiblemente el tipo había estado aquí.

Busque por los cajones y encontré una caja.

"Espero que te gusten las ardillas".

Lo abrí y no podía creer lo que miraban mis ojos.

Comenze a llorar, La caja cayó al suelo, mis piernas comenzaron a temblar.

Psycho Luv<33Donde viven las historias. Descúbrelo ahora