¡¡ Gobierna Este Mundo Conmigo !!

640 50 366
                                    

Un día normal inicia, aunque lo "normal" recientemente era muy raro...

Stone estaba en la sala de su departamento, tomando algo de café, preguntándose "¿ Qué estará haciendo el Doctor en estos momentos ?".

Stone no había ido a trabajar hace más o menos un mes, la intriga de saber qué era este "Gran Proyecto Secreto" en el que estaba trabajando sin descanso su jefe en estos últimos días, lo tenía como un loco. Stone no solamente no había visto a su jefe en todo este tiempo, sino que también, no había recibido noticia alguna de este, estaba preocupado y la curiosidad lo estaba matando lentamente, quería verlo y saber qué tanto hacía.

Le había mandado mensajes de texto mínimo uno o dos veces a la semana, pregutando en estos si es que ya podía volver, preguntando si lo necesitaba y aveces hasta tomando valor para preguntar qué tanto hacía.

Ivo siempre respondía a secas cualquier mensaje del menor, utilizando las palabras más mínimas y evitando darle cualquier detalle o información a su agente de por medio. Las respuestas que Lee recibía mayormente eran un rotundo "No", pero en ocasiones recibía un "Agente yo le diré cuando puede volver, déjeme en paz que estoy ocupado", lo que en realidad le gustaba más, debido a que era como estar ahí recibiendo sus regaños, sonará raro pero hasta eso extrañaba, no verlo le estaba afectando bastante.

Esa mañana se había levantado a la hora de siempre, no quería perder la rutina pero era obvio que no podría hacer ni la mitad de las cosas que hacía en su trabajo ahí en su departamento.

El agente tomó otro sorbo de su café y se mantuvo sumergido en sus pensamientos, la música que escuchaba hacía que cada vez estuviera más metido en su mente, recordando buenos momentos junto a su jefe o simplemente alimentando las dudas que atormentaban su alma cuando pensaba en todo el tiempo que a estado lejos de su amado doctor.

Una cosa era segura, no obtendría respuestas hasta que Ivo quisiera verlo y explicarle todo, eso podría tardar más de lo que su frágil corazón estaba dispuesto a aguantar, pero sabía que tendría que ser fuerte., después de todo pudo estar un año sin él, sí dolió y mucho pero pudo con eso, ¿ Qué tanto daño hacía unos meses o incluso un año más ?.
Sintió un nudo en su garganta y un malestar en su estómago al pensar en la horrible imagen de él y su doctor alejados por un año más, no le gustaba para nada la idea, prefería estar a su lado, incluso si el doctor lo regañaba, prefería romper las reglas impuestas por el del bigote e invadir su zona de trabajar y exigir respuestas, no podía quedarse sin hacer nada, quizás su doctor lo necesitaba pero no quería pedir ayuda ¿ será posible que así fuera ?, ahora estaba peor que antes...

De la nada misma, la melodía que envolvía el ambiente se detuvo y empezó a sonar otra, pero no era cualquier tono musical, era el tono de llama del celular de Lee. El ya nombrado salió volando, importandole poco o nada lo que le pasará a su tasa favorita en el proceso, tomó su celular y atendió, nisiquiera miró si se trataba de su amado, su corazón sabía que tenía que ser él.

- ¡¡¿ Doctor ?!! ¡¡¿ Hola ?!! *gritó más alegre que un niño en su cumpleaños*.

- ¿ Y quién más va a ser ? Idiota *dijo molesto, sin duda era él*. Por cierto baja tu tono de voz, acabas de hacer estallar uno de mis tímpanos, no es como sino hubieras sabido de mí durante años, agente... *habló sonando algo irritado por el comportamiento exagerado de su agente*.

- Oh doctor, usted disculpara., es que e... estado tan preocupado, tengo sientos de preguntas y realmente necesitaba tener noticias suyas, la última vez que hablamos fue hace tres días y simplemente me dijo que no escriba o llame, que usted lo haría ¡ y aquí está ! *dijo super feliz dando hasta un pequeño saltito*.

One Short Stone x Robotnik Donde viven las historias. Descúbrelo ahora