Mi chico... mi CRIMINAL. =Justin Bieber y tú=

Capítulo 3.

-El solo nos apuntaba con el arma y... ¡Bam!. Me separé de ese sujeto, para luego verlo tirado en el suelo. Quedé paralizada, veía sangre salir de el y en verdad, sentía como si fuese a morir- ¡Justin, que has echo, que mierda has echo! - grité tomando mi cabello. Veía a Justin y el estaba... pálido, en verdad parecía un muerto viviente.

-____ Arrojaré el arma -la arrojó hacia algún lado, creo que hacia la basura que se encontraba en el suelo. No podía permitirle esto, iríamos a la cárcel, y no quería eso

-¿Eres idiota? ¿Acaso quieres ir a la cárcel? Justin, por favor, toma el arma, y vayamos con la policía, será lo mejor -lágrimas caían por mis mejillas. Estaba asustada, en realidad lo estaba. Nunca había visto a alguien, ni a el dispararle a una persona.-

- No, ____, si entregamos el arma, sabrán que le he disparado yo mismo, y no, no quiero ir a la cárcel. Me fugaré -se arrodilló ante mi, colocando sus manos en su rostro, para que no lo viera llorar. No podía consolarlo en este momento, no... no podía. ¡El había matado a una persona, lo había echo!. Me acerqué a este sujeto, para luego quitar su pasamontañas. ¡OH DIOS MÍO, ERA UNA CHICA! joder, ¿tendrá... 17 años, quizá? Justin, nos has metido en un gran lío.- Bebé -murmuré. Mis manos temblaban, creo que todo mi cuerpo lo hacía. Ver a una chica, que de seguro es menor de edad, con una bala atravesando su rostro, es... horrible, espantoso. Miro a Justin, para luego acercarme levemente hacia el- Es una chica, y creo que es menor de edad. ¿Qué has echo? -no podía contener mis lágrimas, lloraba como si fuese el fin del mundo... en realidad era nuestro fin del mundo.

-¿Qué? no puede ser, no puede ser -murmuró furioso, mientras tomaba su cabello. El se estaba volviendo loco, en verdad se estaba volviendo loco, oh dios mío.

-Si cielo, creo que es menor de edad. ¿Por qué has disparado? podríamos haberla llevado con la ley, y todo estaría bien, pero tu decidiste disparar. ¿Acaso te has vuelto loco? -estaba triste, estaba desilusionada, y no podía parar de llorar. Quería golpearlo, en verdad, sentía una furia dentro mío.- No pagaré esto por ti, Justin. -limpio mis lágrimas y lo veo seria, intentando no llorar, no quería llorar, ya no.-

-¡No iré con la policía! -me gritó con todas sus fuerzas. Juro que sentí que me iba a matar a mi, así que me asusté, demasiado.- ¿Estás loca, ____? no quiero estar en la cárcel por el resto de mi vida, joder -murmura, muy enfadado. - Me iré de aquí, aunque no quieras. - El tenía muy bien pensado que hacer, quería irse. No lo dejaré irse solo, quería ir con el, aunque yo no quiero meterme en SU problema-

-Iré contigo, no te dejaré solo -me acerco a el, para luego abrazarlo leve. Quitó mis manos de el, con la mayor brusquedad posible. ¿Acaso ahora me odia?-

-No irás conmigo, ____ -murmuró- Vete a tu casa, yo estaré bien, te amo -se acercó a mi, para depositar unos cuantos besos en mis labios. No pude aguantar el llanto en ese momento, así que lo hice, y salté sobre el, para volver a abrazarlo. No quería soltarlo, lo amo tanto, no quería dejarlo ir-

-No me dejes, mi amor, por favor. Te lo pido -sollozo sobre su hombro, espero que no me deje sola, es lo único que pido-

-Lo siento, dulzura -suspira y quita mis brazos de el, para luego levantarse y dirigirse hacia el coche. Se subió a el, y lo arrancó. Me dedicó una sonrisa por la ventanilla del coche, mientras lágrimas comenzaban a salir de sus ojos. "Te amo" susurró ante mi. Dio marcha atrás, y se largó de ese lugar. Yo no podía parar de llorar, en verdad, no podía. Era el peor día de mi vida. Me encontraba arrodillada al lado del cadáver, llorando... me sentía mal. Y si, me dejó sola. Me levanté, para luego tomar de los pies al cadáver, y arrastrarlo hacia la basura que se encontraba en el suelo, para esconderlo. Limpié mis lágrimas y me largué de ese lugar, corriendo lo más rápido que podía, hasta llegar a mi casa. Abrí la puerta de ella con brusquedad, para luego entrar, y si, ¡ver a mi maldita madre follando con uno de sus malditos clientes!. La mataré, literal-

-¡Mamá, que mierda estás haciendo, eres una maldita zorra, te odio! -grité con todas mis fuerzas posibles. Ella se asustó ante el grito, y luego echó de la casa a ese sujeto, para luego acercarse a mi, desnuda, para depositar una cachetada en mi rostro. Apoyo una de mis manos en la mejilla golpeada y la veo, seria-

-Seré una zorra, y todo lo que quieras, pero esto lo hago para mantenerte, para darte de comer, para darte lo mejor -me dice furiosa.

-¿Para darme lo mejor? ¿Darme lo mejor significa venir a MI casa y ver todos los días como folla mi madre con un desconocido? no lo creo -murmuré con tristeza en mis ojos.

-Quiero que te largues de mi casa, y que nunca mas vuelvas. Y espero que termines como tu padre, muerta -suspira y se dirige hacia su habitación. ¿Escuché lo que acabó de decir? ¿Dijo que quería que muriese como mi padre? No, no dejaré que insulte a mi padre de esa manera. Subí por las escaleras lo más rápido que pude, para luego llegar hasta ella, y tomarla del cabello.-

-¡De mi padre no hablarás de esa manera, maldita puta! -golpeaba su rostro con mi puño cerrado, lo mas fuerte que podía, hasta ver sangre salir por sus orificios nasales. Me percaté de lo que estaba haciendo, y la solté. Cubrí mi boca con mis manos, y quería decir lo siento, pero no pude. Ella solo me miró, con lágrimas en los ojos, y dijo "Si, para mi ya estás MUERTA" para luego dirigirse hacia el baño. ¡Joder, que había echo! ¿En verdad golpee a mi madre con muchísima fuerza? No, esto no puede haber pasado, yo no soy así, mierda, mierda, mierda. Suspiré con rabia y tristeza a la misma vez, y fui hasta mi cuarto, para tomar mi valija y guardar prendas y demás cosas mías. Luego de unas cuantas horas, me recosté en mi cama, a pensar... pensar sobre el mal día que tuve, sobre Justin, sobre mi madre. Mierda, estoy sola.