Good Enough

69 15 5
                                    

Nunca fui suficiente para ella, y por consiguiente para mí tampoco.

Siempre fui elogiado por los privilegios con los cuales crecí, fui hijo de un par de diseñadores de moda que, aunque no lo pareciera porque siempre vivimos con lo mínimo necesario, eran demasiado famosos a nivel mundial, era lo que se consideraba un niño agraciado y cuando mi quirk se desarrolló fui considerado un niño prodigio. Me mimaron demasiado.

Tuve cientos de personas alrededor mío que constantemente me decía lo lejos que llegaría, lo genial que era. Todos menos ella.

Aún recuerdo sus gritos, sus regaños injustificados porque "¿Por qué no puedes ser amable como Ikuzu-kun?" "¿Por qué no puedes ser tan inteligente como Izuku-kun?" "¿Por qué eres tan mal hijo?"

No sé, supongo que las constantes comparaciones que hacía conmigo y con Deku fue lo que terminó de manchar mi amistad con él, no busco justificarme en lo absoluto, le causé demasiado daño y definitivamente dije cosas que no sentía por toda la ira que guardaba por comentarios que nunca debí recibir. Fui cruel y gracias a que Midoriya tenía la suficiente entereza mental y el apoyo constante de su madre fue que mi excesivo bullying nunca lo orilló a verdaderos problemas.

No puedo decir lo mismo de mí.

Doy gracias a quienquiera que controla nuestro destino que jamás me crucé con alguien con un Don similar al del novio de Kaminari que pudiese leer mis pensamientos, porque de todas las personas por las cuales yo profesaba un odio o rencor igual o mayor al que tenía por Izuku, quien encabezaba la lista era yo mismo. Me aborrecía, más de una vez deseé desparecer, estar muerto.

Odié que Midoriya me salvara la vez del villano de lodo, odié ser tratado como un fuerte adolescente que resistió hasta que All Might fue a su rescate.

Deku no lo notó, estoy seguro que incluso ahora mismo no lo sabe, pero de las pocas veces que hemos hablado desde que la guerra comenzó, una sola vez hemos mencionado el motivo por el cual me salvó. Él jura que mis ojos gritaban por ayuda; ¿sabes? quizás si suplicaban por ayuda, quizás no por ayuda para salvarme de aquél villano, en retrospectiva buscaba ayuda para que me dejara morir. El villano definitivamente estuvo a segundos de matarme, si Deku no hubiese actuado en ese momento lo habría logrado. Y lo odié aún más por eso.

Odié que incluso con eso no fue considerado un héroe, lo riñeron los supuestos héroes que estaban ahí para salvaguardarnos.

Odié entrar a mi casa sabiendo que mi madre no estaría preocupada por mí y por las secuelas que ese atentado habían dejado, me esperaba un regaño por haber sido débil. Si me iba mal quizá una pequeña golpiza y mas comparaciones. Mi padre no estaba, como siempre.

No puedo ni siquiera enumerar la cantidad de veces que me hizo sentir menos que el resto, hasta que empecé a creerlo; la entrada a la UA y el porqué Deku había entrado con mención de All Might, por qué no fui el delegado de clase, por qué no fui el primero en la carrera del festival deportivo de UA... me llamó "Animal" por la forma en la que tuvieron que sujetarme, me avergonzó del mismo comportamiento que ella tenía conmigo... Nunca era suficiente.

Cuando me secuestraron, logré sentir más aprecio por parte de los villanos que de quién debió cuidarme desde que era un niño y de aquellos que debían guiarme... Aquel villano de piel reseca me mostró en ese momento más humanidad que cualquier otra persona hasta ese momento, y por un momento realmente consideré ser parte de ellos, por un momento sentí que aquel lugar podía ser un hogar que nunca había tenido.

Pero en verdad quería ser un héroe, quería salvar personas, en especial niños que como yo tenían una infancia extremadamente difícil.

Ya me había culpado a mí mismo de la muerte de All Might como héroe, esperaba... Dios, por una vez esperaba llegar a casa después del hospital y recibir un abrazo y muestras genuinas de preocupación. Esperaba que mi secuestro hubiese sacado ese lado maternal que nunca había mostrado conmigo pero sí con Deku... por una vez realmente quería llegar a mi casa. Sin embargo, luego de casi dieciséis años debí haber aprendido que de ella no podía esperar mucho, cuando llegué estaba sentada frente a la puerta, me miró de reojo y volvió a su revista. No hubo abrazos ni muestras de preocupación, no se alegró de que su hijo regresara con vida a casa luego de haber sido secuestrado, no había un hogar. Y tarde aprendí que en ese lugar nunca lo habría.

Incluso Aizawa lo notó luego de ir a hablar con mis padres, me dijo que después hablaríamos aunque no fue así y no lo culpo; tenía un grupo de veinte adolescentes a su cargo y definitivamente una vida privada, no podía preocuparse por el segundo - ni siquiera en ello podría ser el primero - alumno más problemático si el resto le daban igual o más problemas.

O sí, pues no pasó por alto mi comportamiento luego de fallar el examen para la licencia de héroe profesional... supongo que esperaba gritos pero para ser honesto, a este punto ya me había cansado de gritar y gruñir... necesitaba un descanso.

Supongo que en estos momentos finalmente puedo hacerlo. Logré disculparme con Deku y gracias a su noble corazón y a la ligera obsesión que tiene conmigo pudo perdonarme, logré salvarlo y regresarlo a la UA. Me gusta creer que incluso ayudé a que Todoroki mejorase un poco la relación con el bastardo de Endeavor, además logré que me llamara amigo. No sé en verdad cómo termine la guerra, supongo que aún podemos ganar, Deku se volverá el héroe número uno en cuanto se gradúe, Todoroki será el mejor héroe de rescate, Aizawa adoptará definitivamente a Eri para volverse una familia... no sé, espero que sí.

Me gustaría haber hablado a solas con All Might para pedirle que firmara la tarjeta que cargo conmigo desde que supe que sería un profesor de la UA, me habría gustado decirle a Todoroki que quizá me gustaba un poco, a Beast Jeanist que realmente aprecié su ayuda y a Deku que sí, sí es mi amigo pero no podré.Mis ojos se cierran aún peor que en aquel incidente con el villano de lodo, escucho el ruido de gritos a lo lejos y un par de voces llamando mi nombre, pero siendo del todo honesto no quiero volverlos a abrir. Necesito un descanso, aunque si me gustaría hacerle una última pregunta;

Ahora, madre, después de todo lo que logré, de las personas que salvé y de lo mucho que sacrifiqué ¿Ya soy suficiente?

Cierro mis ojos, esperando serlo. Y no despertar más.

Good EnoughDonde viven las historias. Descúbrelo ahora