Capitulo 3

210 26 0
                                    

Dan

Dan entró al apartamento de Jennie, tratando de mantener la calma, aunque sentía que algo no andaba bien. El ambiente era distinto; las luces eran más tenues de lo habitual y había una suave música de fondo.

—Vaya, está... muy acogedor —comentó Dan, mientras se quitaba los zapatos y miraba a su alrededor.

—Gracias, quería que fuera un ambiente relajado para los dos —respondió Jennie con una sonrisa, mientras se acercaba con dos copas de vino—. ¿Te gusta el vino?—

—Sí, aunque no suelo tomar mucho... —respondió Dan, un poco incómodo mientras tomaba la copa. Notaba algo extraño en la actitud de Jennie.

—Vamos, solo es una copa, Dan. No seas tan formal —Jennie le guiñó un ojo y se sentó a su lado en el sofá, más cerca de lo que él esperaba.

Dan sonrió de manera incómoda. "¿Qué está pasando aquí?" pensó.

—Bueno... ¿qué vamos a cenar? —preguntó, tratando de desviar el tema.

—Oh, pedí algo ligero, no quería que la comida nos distrajera de la conversación —dijo Jennie mientras se acomodaba en el sofá, estirándose de manera sutil para que Dan notara su vestido ceñido.

—¿Conversación? —preguntó Dan, levantando una ceja.

—Sí, Dan... ya llevas bastante tiempo siendo mi asistente y, bueno, siempre me ha parecido curioso que nunca hablas de tus asuntos personales —Jennie lo miró directamente a los ojos—. Especialmente... si tienes a alguien especial en tu vida.—

Dan se quedó paralizado un segundo. "¿A qué se refiere?" pensó. Pero decidió no darle importancia.

—Oh, no, realmente no tengo tiempo para cosas como esas —dijo Dan, riéndose nervioso—. Mi trabajo es bastante demandante, ya lo sabes.—

Jennie sonrió para sus adentros. "Es evidente, está escondiendo sus sentimientos", pensó. Decidió atacar de otra manera.

—Bueno, Dan, con lo mucho que trabajas conmigo, me sorprende que no te hayas... interesado en alguien cercano —dijo Jennie, mientras se inclinaba un poco más hacia él—. Ya sabes, alguien con quien compartes tanto tiempo.—

Dan parpadeó, sin captar el coqueteo de Jennie.

—¿Te refieres a las chicas? Sí, son buenas amigas, pero no es algo en lo que piense. Además, creo que sería poco profesional —dijo él, mientras miraba a otro lado, sin notar lo cerca que Jennie estaba de él.

Jennie se rió suavemente y se deslizó un poco más cerca.

—¿Y qué hay de mí? —preguntó, en un tono que pretendía ser seductor—. Pasamos mucho tiempo juntos, Dan... ¿nunca lo has pensado?—

Dan la miró, confuso.

—¿Pensar en qué? —preguntó, sin entender a dónde quería llegar.

Jennie suspiró, frustrada por dentro, pero mantuvo su sonrisa.

—Bueno, ya sabes... a veces dos personas que trabajan tan juntas... pueden sentir algo más —Jennie lo miraba intensamente, esperando ver una reacción en él.

Dan, ajeno por completo al intento de coqueteo, solo se rió incómodamente.

—Oh, claro... entiendo. Pero creo que es importante mantener las cosas profesionales, ¿no? Quiero decir, no creo que mezclar el trabajo y las emociones sea una buena idea.—

¿Que le sucede a mi asistente? (Jennie y tu )Donde viven las historias. Descúbrelo ahora