𝑺𝒘𝒆𝒆𝒕 𝑵𝒊𝒈𝒉𝒕𝒔 [Moonsun]

03 - No Iras

Byul manejaba su auto con cansancio.

Estaba harta y su cabeza dolía por la mezcla de feromonas en su trabajo.

Ella era bartender y dueña de su propio bar. Su bar Lussuria a Terra era muy reconocida en la ciudad. Tanto que todos hablaban de ello como un lugar turístico del todo los días.

Pero como negar hablar de ello, la experiencia allí era afrodisíaco.

Sala subterránea, pisos oscuros, sillones de cuero y luces neones. Para aumentar la diversión, también se incluían mesas de billar, mesas de apostar y dardos.

Pero antes tenían que firmar un establecimiento por contrato, habían personas estúpidas e inmaduras que utilizaban los objetos punzo-cortantes para amenazar de muerte en una pelea. Una persona muerta llegaría joder muchas cosas, pero más vale prevenir que lamentar. El establecimiento firmado librarian de accidentes al bar, aseguranza intacta.

Es porque eso que muchas personas se sentían seguras allí, y ni hablar de la privacidad. Los ricos amaban desenmascarar su verdadera cara allí en las salas VIP.

Pero eso sí, la pelinegra no metía nada de bodyshop. Eso era algo que no le gustaba y se limpiaba las manos.

A decir verdad le gustaba tener su propio negocio, generaba un ingreso demasiado decente y aparte de eso, la pelinegra trabaja de seguridad para una agencia de eventos.

Eso solo era un trabajo para distraerse en el día, no lo necesitaba en realidad.

Con los lienzos de tinta impregnado en su piel y su cuerpo bien fornido, la Alfa claramente demostraba dominio, emitía vibras de "chica mala" a cualquiera que le viera. Sin mencionar su aroma que encantaba a narices sumisas.

Tags que le quedaban como anillo al dedo, decían que se parecía una Alfa rider, un artista importante e incluso una mafiosa.

Cumplidos así elevaban el ego al saber que mojaba interiores. A simple vista era MoonByul, la Alfa más dominante que podría existir.

Aunque se dice que ciertamente las apariencias engañan...

Byul justo ahora iba a casa. La pelinegra decidió no ir a monitorear el bar, pondría a alguien a cargo y descansaría un poco ya que apenas regresaba de un viaje de dos semanas por ser guardia de seguridad en un evento importante.

Solo quería llegar a casa con su linda chica y ver una película con ella.

Si.

Su linda Yongsun. Una Omega de estatura promedio, cabello castaño y aroma a canela y fresas.

La historia de cómo se conocieron hacé tres años fue parecida a una comedia. Una comedia que seguramente sería dominada para los premios PrimeTime Emmy.

La Alfa había conocido a Yongsun cuando vigilaba un evento de marketing. Personas de diferentes empresas y círculos sociales se presentaron en dicho lugar, por lo cual la seguridad era crucial.

Cómo siempre se espera, no había nada de lo que preocuparse más que recorrer los pasillos y estacionamiento, hasta que una pequeña acción ajena le pareció sospechosa. Byul se había percatado de una persona subiendo secretamente al segundo piso del establecimiento, un lugar donde no había nadie ya que la fiesta era abajo.

Para confirmar la actividad sospechosa, la pelinegra subió las escaleras, sus pasos siendo silenciosos hasta que llegó a la vuelta de una esquina en dónde pudo escuchar pequeños reproches y lamentos.

La Alfa frunció el ceño en confusión, no sintió la necesidad se sacar el arma de su cinto así que salió preguntando quién estaba allí de forma inesperada.