Mi oscuro amor...

me estoy ilusionando

Otro día nuevo en la escuela, y está vez en clase me pidieron hacer equipo con el negro, pero que? Dios, su segundo día y enserio me molesta, pero... Vamos no puedo ser tan infantil por ese comentario, después de todo el no sabe el contexto.

-ehh, Bueno que haremos entonces... Tao, o prefieres.. chiki-

-No me llames así, no lo hagas.- dijo en modo de advertencia mientras sostenía en sus brazos una ficha con la que trabajarán su proyecto.

-ok ok tranquilo. -Dijo moviendo sus manos en forma de olas.

-el proyecto consiste en resumir un tema público, uno que necesitemos con urgencia, cómo...

-familias estables - dijeron ambos al mismo tiempo.

Por alguna razón, estos se sonrojaron fue extraño y... Agradable.

-o puede también ser otra cosa, si tú lo prefieres -Dijo Tao desviando la mirada.

Al final entregaron eso, ellos se sentían felices, Tao vio que Adriano no era un chico que solo le traería problemas, vio que lo juzgo mal por haber estado en un internado, por cierto, por qué habría estado en un lugar como ese...?

Sonó el receso y ambos se fueron del aula Tao por su lado y Adriano por el suyo.

Tao no pudo evitar sonreír al despedirse de el chico alto.

¿Pero por qué? ¿Esto es raro?

Pasaron dos semanas y Tao se llevaba de maravilla con Adriano, al parecer Tao está empezando a sentir algo... Diferente, en clases empezó a tomarle de la mano, definitivamente se estaba empezando a ilusionar.

A- entiendes la clase está aburrida...

T- Si y... Deberías prestar atención.

A- Hmmm nah, prefiero verte a ti, *dijo tomando su mano* hoy estás radiante.

Tao no sabía cómo reaccionar, pero no sé queria mover.

Estaba en el receso cuando su grupo de amigos empezaron a molestarlo.

-Vaya... 2 semanas de clases y ya le tiraste ojo... Velocista eh. Dijo samira.

-callense, locos, solo es mi amigo.

Luego llegó Camila, una niña que también conocía a todos, ella era de otro salón.

-Hola, ehh contexto.

-Tao se está llevando bien con alguien, y uUUuuU, se sonroja cada que le hablamos de el...

-le gustan los chicos malos.

-Cayense, (dijo tapándose la cara)

-Vaya y... Quien es?

-Es un chico negro de nuestro salón, es alto y de pelo de Condorito.

-hmm me suena,

-mira es el- Dijo Fiore señalando lo con el dedo.

Camila lo vio y vio de quien hablaban pero algo estaba mal, ese negrito no estaba soltero, aquel tenía novia, era nada más y nada menos que una compañera de clases suya, Kiara...

¿Se lo digo o no?

-Tao... Escúchame.-Dijo pero no fue escuchada.

-en clases me dió la mano, Y... Me dijo que estaba radiante..., No se, me estoy ilusionado ayuda.

Dios, no quiero romperle el corazón...