Sueño y Agridez

Su locura

Solo veo oscuridad, espero y no sea ese sueño de nuevo... Solo siento que alguien postra sus manos en mi cintura y me abraza, que raro, sus manos son cálidas.

—Humano? —mencioné a ese chico, el puede verme, tocarme y sentirme, fue extraño cuando pasó la primera vez, se suponía que nadie podía verme, pero me sentí bastante emocionada y aterrada de que pudiese hacer eso.

—Te encontré! Y por décima vez, mi nombre es Renée!! —dijo feliz Renée, siempre olvido su nombre incluso cuando me esfuerzo en recordar, estábamos flotando, o bueno, el estaba flotando junto a mi, soy un ente y no recuerdo cómo conocí a Renée, solo recuerdo abrir los ojos y estar en una cama mientras el estaba a mi lado, parecía que me encontró y me cuidó, no estoy segura.

Tampoco recuerdo cómo morí, pero sé que me llamo Sora.

—Es hora de irnos Renée, debes dormir, ya pasó el efecto—le avisé.

—Ajaaaja... De hechooo- y-ya me dormí!—reía aún con el efecto.

—¡¿QUÉ?! Ay no.. no de nuevo... Carajo, cuántas veces debo decirte, no te duermas después de..

—De qué? Por qué siempre tratas de evitar hablar de eso?—me dijo volteándome y tomándome de las mejillas.

—Sabes qué? Olvídalo, ya me arrechaste!—me alejé de el dándole un empujón en el pecho, miré hacía arriba y noté que empezaba a formarse un cielo, pero, este era de color verde.. realmente no recuerdo este sueño, miré a Renée y fruncí el seño de brazos cruzados.

—Oh vamos no te pongas así! Mira el lado positivo, soñaré algo nuevo.

—Sí, y seguramente deba salvar tu jodido trasero otra vez.

—No digas eso, sabes que siempre te agradezco de la mejor manera que pueda.

Devolví a ver al frente y bajé la mirada, Renée económicamente está estable, pero, siempre busca ganar más, suele gastar su dinero en sustancias, dudo que pueda vivir más, pero espero que solo sea mentira, realmente aprecio mucho a Renée. En fin... Me devolví y lo tomé de la mano jalándolo para tratar de escapar, las mantas con las que cubro mi cuerpo empezó a desintegrarse, empezó a salir fuego detrás de nosotros, miré hacía atrás y cargué a Renée en mi hombro, soy fuerte así que no fue complicado, aún así ese idiota es una pluma. Dejé de correr ya que había una caída muy alta, no lograba ver bien el fondo, pero luego la neblina desapareció y observé un río bastante amplio y de aguas limpias, sin pensarlo me lancé. Caímos al agua y saqué a Renée del agua arrastrándolo del brazo, empezó a toser soltando agua de su boca.

—Y luego dices que no te salvo—me senté en una piedra grande.

—Oh vamos cariño, te lo pagaré al despertar, no seas tan dramática—decía tratando de tomar aire.

Miré hacía abajo y noté que no traía mi manta.

—MALDITA SEA!—me quejé tratando de taparme.

—Por qué te cubres? Ya te he visto antes así.

—Qué dijiste?

—Nada!

El sueño comenzó a desaparecer y todo se tornó negro de nuevo, empezamos a flotar y nuestra ropa volvió de nuevo, miré hacía adelante y ví que estábamos en una calle, ví que estaba llena de barro, y noté que habían árboles con enredaderas.

—No.. maldición... ESTE NO POR FAVOR!—pisé con fuerza pero olvidé que estaba flotando así que me dolió y caí quedando pies arriba.

—JAJAJAJAJA

—SÍ RÍETE TODO LO QUE QUIERAS LUEGO ME LAS COBRARÉ!!

Me acomodé y el panorama estaba completo, comenzó a llover como siempre y el barro empezó a volverse espeso, tomé la mano de Renée y me dirigí hacía la subida frente a nosotros, estaba resbaloso así que hice lo que pude por no caer, miré hacía la izquierda y vi una manada de serpiente, al parecer estaban rodeando la subida.

Voltee a ver a Renée y le golpeé el hombro.

—En serio? SERPENTINES?!! Joder, aveces me sorprendes—dije soltando una risa de nervios.

—Vamos, no te preocupes este estoy seguro que que será calmado.

—Siempre dices eso.

Escuché un ruido retumbante, miré al frente y noté que anochecía cada vez más.

—Continuará...