Lily//Jegulus

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Solo si supieras cuanto me gustas

-Ey, Regulus, te estoy hablando-La voz de Pandora aquel miércoles por la tarde lo sorprendió.

-¿Qué?

-¿Qué pasa?

-Estoy enamorado.

-Dejame adivinar. ¡De Barty!- lo molestó

-Si, seguro- el slytherin rodó los ojos.

-¿Por qué no le dices que te gusta?-preguntó Pandora mirando hacia la dirección donde se dirigía la mirada de Regulus.

Pero observo tus ojos mientras ella camina por...

-¿No ves que a Potter le gusta Evans?- habló enojado consigo mismo ¿por qué se tenía que enamorar de chicos que nunca saldrían con él?

Pandora suspiró, la mirada de Potter estaba centrada en Lily, quien venía hacia ellos.

-Pando, ¡Hola! Regulus. Te olvidaste la pluma en el salón de pociones- la pelirroja le entregó la pluma a la rubia y se fue, en búsqueda del de lentes.

Qué espectáculo para los ojos doloridos

Regulus no sabia por qué los ojos de James se veían decaídos usualmente, aunque tuviese una sonrisa en su cara. Lo único que sabía era que él quería lo mejor para el gryffindor.

Más brillantes que el cielo azul

Las veces que James lo había descubierto viendolo desde lejos eran incontables. Pero el color de sus ojos estaba marcado en su alma. Sus ojos brillaban ante un partido de quidditch ganado, slytherin solia perder a su mando solo para verlo sonreír, no solo a su boca, sino a sus ojos. Verlos brillar era la mejor recompensa que podía tener. O cuando la Lupin llegaba con un tupper lleno de galletas de chocolate, específicamente el se encargaba de hacerle llegar los ingredientes para que las haga.

Ella te tiene hipnotizado...

Pero nada hacia brillar tanto sus ojos como ver a la pelirroja. El nudo en su garganta se agravó

...mientras yo muero

Dolor, era lo único que sentía al estar lejos de James Potter. Así que solo moría lentamente. Despacio y sin apuro. Mientras que seguía intentando respirar.