WE ONCE WERE

4/11

Ya no siento lo que sentía antes. Con ella sentía que podía llegar al fin del mundo, era mi primer pensamiento y el último del día, generando en mi un sentimiento de querer aferrarme a mi vida. Sentía que tenía un lugar en este mundo, por primera vez, sentía que alguien necesitaba de mi.

Tonta fui en pensar que está montaña rusa de sentimientos iba a durar. Mis pensamientos intrusivos volvieron, no sentía que perteneciese donde ahora me encuentro. Nuestros destinos son diferentes, solo siento que soy un motel en su viaje, un lugar donde descansar antes de seguir su viaje.

Ojala volver atrás, cuando ella no me quería y yo si lo hacía, sentía que al menos podia luchar por algo, tenía algo que perseguir... Ahora me encuentro en otra relación tóxica, parece que mi destino solo sea ser un parche para la inestable vida de mis parejas. ¿Irónico, verdad? Soy consciente que no es una relación sana, pero hay algo que me impide romper lazos. Quizás sea resultado de todos mis traumas infantiles en los que no me sentí querida, ahora requiero sentirme reconocida, aunque me desprecien.

Otro sábado en el que quedamos juntas -el único día en que nos vemos- damos un pequeño paseo y volvemos a su casa. Otro sábado en el que me siento usada, solo soy un juguete sexual. Sexo sin amor, solo para contentarla. Otra noche en la que no para de decirme "te quiero" y "te amo", palabras que no salen de mi y las digo forzada para contentarla. Me doy asco al decir esas palabras cuando no lo siento. Solo en ocasiones logro gesticular y decir un frío "te quiero". Los "te amo" se me hacen un nudo en la garganta, raramente le respondo con ellos.

Besos fríos, besos sin sentido. "Bésame" me dice suavemente y le sigo la corriente. No tienen significado para mi, solo son eso, "besos", el actor de tocar los labios. No transmiten nada para mí. Cuando nos besamos solo pienso en empezar para terminar. ¿Dónde está esa sensación de odiar el paso del tiempo y querer eternamente besarla? ¿Dónde quedaron esos momentos en los que no podía dejar de pensar lo dulces que eren sus besos?

Mi dismorfia corporal está volviendo y ella no me está ayudando a disminuirla. Me da asco que me vea y que me toque. Lo odio. Odio que me diga que soy hermosa y luego destaque una parte de mi cuerpo. Odio que lo haga. Y ella lo sabe, pero elude mis sentimientos.