34.El mensaje que nunca llega

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Me desperté y extendí el brazo esperando toparme con el cuerpo de Jungkook, pero lo único que toqué fueron mis sabanas y un vacío dónde antes estaba él.

Me incorporé confuso, miré el reloj del móvil y me di cuenta de que eran las nueve de la mañana.

Su ropa no estaba, no quedaba rastro de su presencia en la habitación como si nunca hubiera estado. Miré el móvil otra vez para ver si tenía algún mensaje, nada.

Me puse el camisón y bajé a la cocina y al salón para ver si estaba desayunando, pero nada.

Sólo estaban Tae y Yoongi. Él sentado encima de Yoongi echándole sirope de fresa a gofres hasta que quedaron sepultados bajo una montaña de ese líquido.

-Buenos días Minnie- empezó Tae mientras se levantaba- Al final no bajaste ¿Te quedaste dormido? Al principio pensamos en subir pero pensamos que lo más seguro era que estuvieras descansando y tampoco era plan de despertar.

Pues menos mal que no entraron por que la situación habría sido de todo menos graciosa.

-Mmm algo así. Yoongi ¿Sabes donde está Jungkook?

Tae ató cabos rapidamente y abrió tanto la boca que parecía que se la iban a salir trozos de gofre.

-No, ayer por la noche cuando estaba recogiendo bajó y se fue.

-¿Te dijo el por qué?

Negó con la cabeza y le dio un sorbo al Nesquick

-¡Ah estoy tan emocionado!¡Por fin Jimin, tras años de castidad has tenido tu primera vez!¡Quiero que me lo cuentes absolutamente todo, no te dejes ni un maldito detalle!

-¿Te lo puede contar después? No me apetece oír a mi hermano diciendo cómo tuvo sexo con otro tipo.

-No te preocupes, luego te lo digo todo, ahora le voy a llamar por si....

-No debes llamarle, tendrá sus motivos, pero vas a quedar como un arrastrado si lo haces- dijo Yoongi

-Bobadas- le corrigió Tae- hazlo, puede que haya pasado algo es mejor que te asegures.

Asentí y con nervios me retiré a la terraza para marcar el número. Un tono, dos, tres, cuatro, cinco, buzón de voz.

No tenía ni idea de que pensar o hacer. Una parte de mi quería pensar que habría pasado algo urgente pero otra no paraba de formular la pregunta que más miedo me daba que se cumpliera ¿Me había utilizado?. Eso era poco probable, se había confesado, yo le gustaba para algo más.

-Es normal que estes preocupado, pero tienes que darle un voto de confianza, seguramente ayer te digo lo que sentía, te conozco y se que si no lo hubiera hecho no le hubieras dejado- irrumpió Tae en la terraza.

-Si aún así no me ha mandado ningún mensaje creo que es lo mínimo que podría haber hecho después de irse así.

-Ellos no tienen la misma concepción que nosotros de estos casos, tu estate tranquilo el lunes habla con él y ya verás cómo te da una buena justificación.

Asentí e intente apartar las dudas.

-Y bueno me tienes que contar, tiene pinta de ser buenisimo en la cama y no me lo niegues.

-Nunca he estado con ningún chico así que no tengo con que comparar pero puedo intuir que tu instinto no se equivoca.

Tae rió y me abrazó- Bienvenido al club, ya estabas tardando. Espero que Jungkook se porte bien contigo o iré y le cortaré los huevos.

Solté una carcajada- Lo mío es peor, por que si alguna vez Yoongi te vuelve a hacer algo, te pasaré unas fotos en las que sale vestido de unicornio para que las publiques por ahí

.-Que adorable, yo quiero esas fotos. Yoongi vestido de unicornio tiene que ser sinónimo de un vídeo de diez horas de gatitos haciendo monerías.

-Mas bien de un niño de diez años con cara de querer matar a alguien.

Volví a mirar disimuladamente el móvil esperando el mensaje que nunca llegaba.

-No lo mires, repito confía en él.

Asentí y pasé toda la tarde con Tae hablando de todo y de nada, pero sin poder quitarme lo de la cabeza ni un segundo.



Un capítulo cortito ya estamos en la recta final de esta historia gracias a todos por leer mañana subo los últimos capítulos o en unas horas por qué ya son a las 12.

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Ese Virgen Es Mío~KookminDonde viven las historias. Descúbrelo ahora