No más

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Capítulo 3

La clase de historia es extremadamente aburrida, el profesor Wiki es pésimo enseñándola, pero al menos me ayuda a distraerme con mi mente ya que es más interesante que oírlo.

Esta mañana estaba decidida a cambiar, solo que ahora tengo que pensar en cómo puedo lograr eso. No he visto a Jason desde que llegue, aunque eso ya no es raro últimamente. Pensando en los últimos meses hace que cada segundo de esta tediosa clase este más segura de que ya no quiero que así sea mi vida, no estoy dispuesta a soportarlo por más tiempo, no me pienso conformar con las sobras de nadie. 

La forma en la que se lo diga realmente ya no es importante, el final seguirá siendo el mismo, no importa cuánto endulce las palabras... De hecho ni siquiera sé si eso haría falta ¿A él le dolería? Realmente no creo, pero eso ya está de más, las respuestas a mis preguntas no formuladas hacia él no cambiaran lo que desea mi corazón. Decidí no ser yo la que lo buscara ya que cuando lo intento nunca lo consigo, además de que quiero ser yo la que controle esta situación no al revés, así que esperar a que él llegue es la mejor opción.

Fui a mi casillero para poder tomar los libros de mi siguiente clase y fue al lado de el que se encontraba el chico que ocupo mi mente toda la mañana, es sorprendente que mientras me acerco y lo observo no sienta absolutamente nada, ni siquiera un pequeño arrepentimiento por nuestro tiempo compartido que quiera hacer que retroceda lo que haré.

-Hola -dije una vez que estuve a su lado- ¿Que te trae por aquí?

- Aquí estudio

- Ja ja ja, chistosito, me refiero a que te trae al lado de mi casillero.

- Vengo a decirte que el partido será el viernes y después del haremos una fiesta en mi casa, me preguntaba si querías ¡y de verdad espero que sí! si podrías preparar los refrigerios, eres excelente en eso.

Claro que sí, él no está aquí por mí, él está aquí para pedirme que yo le sirva a todo el equipo de hockey.

- lo pensaré y luego te digo. ¿Cómo te la pasaste ayer? ¿Hiciste algo interesante?

-No realmente, fue un domingo común, invite a alguno de los chicos y pasamos un rato, nada del otro mundo.

¡No puedo creerlo! ¡Ni siquiera se acordó de que había quedado conmigo!

-Jason tengo que hablarte de algo...

-Claro dime, ¿qué pasa bebé?

- Primero que nada no me digas bebé, sabes cuánto odio el terminó. Mira he estado pensando y creo que tú y yo debemos terminar -listo, directo y al grano- ya no puedo seguir fingiendo que somos una relación.

- Pero bebé ¿De qué hablas? Somos una gran pareja, sales con el mejor deportista de la escuela, cualquier chica querría estar en tus zapatos, considérate afortunada.

- Creo que después de todo este tiempo no has comprendido nada de mí, yo no soy "cualquier chica" y si piensas que me quedaré contigo solo por el título que tienes en la escuela estas equivocado. Mira es mejor así, tú no quieres a nadie más que a tu reflejo y yo me amo lo suficiente como para dejar ir a un chico como tú. Mira ambos sabemos que es lo que has estado esperando por varias semanas, así que te dejo más fácil el camino - me di media vuelta y camine, hasta que me voltee y el seguía en el mismo lugar, así que aproveche y dije- y dile a tu grupo de atletas sin cerebro lo que quieras, tú decides quien termino con eso, no te costara trabajo, eres muy bueno echando cuento.

Seguí caminando por el pasillo hasta llegar a la puerta del salón. Lo había hecho, de verdad lo había hecho. No había mejor sensación, ya no cargaba con ese peso. Era libre y podía respirar por fin. A pesar de sentir esta libertad, una parte de mi le hubiera gustado que Jason no hubiera cambiado en lo absoluto, porque bueno cuando me enamoré de él no era un chico orgulloso y lleno de ego, sino que era un chico tímido, gentil y encantador.

 Así fue hasta que entró en el equipo de hockey al final del primer año, todo parecía seguir igual por un buen tiempo hasta que la presión de empezar a ser la estrella de la escuela empezó a volverlo en alguien distinto, el intentaba ser perfecto y al hacerlo quería volverme a mi perfecta, pero yo no soy esa clase de chica, tal vez no este 100% segura de que clase de chica soy, pero sé que no soy plástica. Ese es mi siguiente paso, contestar esa pregunta ¿Quién soy yo?


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¡Hola! Miles de disculpas por la tardanza, es que la prepa es muy demandante, pero estoy por salir de vacaciones y estaré escribiendo más seguido. Gracias por leer

¿Cuanto haces por amor?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora