Sangre y Amor

Capitulo 5

Buenas¡ Aquí yo otra vez con el siguiente capitulo. 

Quiero volver a decirles lo genial que me hacen sentir con su apoyo. Espero que sigan la historia y que me sigan mostrando su apoyo. Un millón de besos y abrazos para todas ustedes, hermosas personas, que leen, votan y comentan. No las conozco, pero las quiero de aquí al cielo.  

Me hacen tan feliz...:) 

Espero volver a encontrármelas en este capitulo. 

Las quiero. 

Aegon tenía las tarjetas de crédito sobre la mesa de centro, mientras observaba como Luke movía los dedos rápidamente sobre el teclado de su computador.

-No puedes decirle a nadie o te las volveré a bloquear. –El pelinegro le advirtió una vez que hubo terminado.

-Bien. ¿Cuánto dinero necesitas?

Luke pestañeó repetidas veces antes de decirle el monto que necesitaba. Una vez que Aegon lo escuchó, lo miró de forma seria por algunos segundos, y prosiguió a reírse a fuertes carcajadas.

Baela entró a la sala y observó a su hermano y a Aegon que reía sin parar. -¿Qué estás haciendo, Luke? ¡No, no me digas! –Lo señaló una vez que entendió que era lo que su hermano intentaba hacer. -¡Pero, Luke!

-No hay otra opción de conseguir el dinero. –Lucerys zarandeó de forma gentil el hombro del rubio. -¡Deja de reírte! Es en serio. ¡Deposita el dinero a la cuenta que te daré! –Le ordenó.

-Un momento, mocoso. –Aegon los observó detenidamente. -¿Para qué diablos quieren tanto dinero?

-¡No es asunto tuyo! –Baela se sentó en frente de ambos.

-No estarán comprando drogas ¿Verdad?

-¡¿Pero quién demonios te crees que soy?! –La chica se restregó el cabello impaciente.

-No es nada de eso. –Luke le sonrió. -¿Estás preocupado por nosotros?

-Quiero coger con tu hermano, Strong. –Aegon le devolvió la sonrisa. –Si descubre que yo les facilité el dinero para lo que sea que estén haciendo, no creo que me resulte.

-¡Deja a Jace en paz! –Baela lo apuntaba con un dedo. –Deposita el dinero. Nadie se va a enterar.

-Sabrán que depositaste el dinero a otra cuenta. –Le explicaba Luke. –Pero no podrán averiguar a cual, ya que será una cuenta fantasma que no podrán rastrear.

-Bien. –Aegon suspiró. – Entonces vamos a desbancar una de las cuentas de Otto. Ahora, si me descubren, pagarán las consecuencias. –Amenazó a los hermanos y les depositó el dinero. Después de eso, salió de la sala y se marchó feliz sin pensar muy bien a dónde dirigirse, pero siendo consciente de que ya necesitaba salir de King's Landing.

-¿Confías en él? –Baela le preguntó a su hermano.

Luke solo se alzó de hombros. –Odia a Otto, así que no dirá nada, además necesitaba las tarjetas de crédito, es un trato justo. -Le transfirió el dinero a Alyssa y está le respondió casi inmediatamente con un mensaje. Dentro de dos días tendría las identificaciones y la documentación falsa para que esa pequeña familia pudiera empezar desde cero realmente y, así, olvidarse por completo de los Velaryon.

Aegon no perdió el tiempo. Llamó a uno de sus no pocos conocidos y suspiró cuando este lo acorraló contra la puerta del departamento que Aemond le había dejado a su nombre. Era el mismo lugar donde años atrás habían escondido a Halaena para que no se casara.