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Goki y los demás llegaron a donde sería el torneo del poder. Era emocionante saber que en unos instantes se enfrentaría a sujetos muy fuertes. Todos esos sujetos se veían fuertes, tanto así que su cola se balanceaba.

Vegeta por otro lado no se encontraba para nada emocionado. No pasó desapercibido para él como esos insectos miraban a su compañera. Esos desgraciados no ocultan para nada sus expresiones lascivas.

¡Esas sabandijas! ¿Cómo se atreven a mirar a mi Karot?

No solo eran ellos, los malditos dioses de la destrucción tampoco se quedaban atrás. Ya estaba lo suficientemente irritado teniendo que aguantar a Bills en su universo.

Salió de sus pensamientos con la llegada de Kiabe.

Kiabe: ¡Maestro! Un gusto verlo

Vegeta: Tsk lo que sea

Tenía que admitirlo el mocoso no era del todo un insecto, al menos era buen aprendiz. Pero no olvidaría como el mocoso se sonroja cada vez que está cerca de Karot. Justo como ahora que está recibiendo la atención de su mujer al igual que otras dos saiyayin.

Hmp...ellos también son saiyayin. Sin embargo esta claro de que son bastantes diferentes a lo que él conocía...en especial porque carecían de cola.

Siguió viendo a su alrededor viendo a los guerreros que llegaban y su vista se enfocó en los que según Whis eran del universo 11. Había un enorme ki viniendo de ellos...buscando con mayor precisión se dio cuenta de que ese ki venia de cierto tipo.

Uno con ridículo traje rojo, seguramente otro de las fuerzas del orgullo, parecía ser el líder. Pareció darse cuenta de su presencia y volteo, no le gusto para nada esa mirada como si estuviera viendo a alguien insignificante.

¡Insecto! Estas viendo al príncipe de los saiyayin. Pertenezco a la realeza y elite de mi raza.

De pronto la expresión del tipo gris cambio así como hacia donde miraba.

Curioso por saber que hizo que cambiara su cara volteo a ver en esa dirección, y la respuesta no le gustó nada.

Estaba mirando a Karot con un fuerte sonrojo y los ojos dilatados.

Karot se dio cuenta de su presencia y también lo miro curiosa. Sabia cuanto ella le interesaba enfrentar a tipos fuertes y superar sus límites. Le encanta y enorgullecía eso de ella como saiyayin pero lo odiaba también como el infierno ver como un tipejo tenía su atención.

Nunca ha sido de los demostrar afecto publico...o al menos no hasta que Karot se hizo su compañera y madre de sus cachorros.

Karot no solo poseía gran poder logrando ser la primera en convertirse en ssj, sino que además que era condenadamente hermosa. Decir hermosa era poco, Karot era todo: linda, hermosa y sexy. Su mujer lo volvía loco, en todos los ámbitos, pero mayormente lo ponía cachondo y deseoso de aparearse, no por nada tenían ya a Gohan, Vegito y Goten.

Ha tenido que amenazar de muerte a varios sujetos que han intentado arrebatársela. Y a los suficientemente estúpidos como para intentarlo ha disfrutado mandándolos al infierno.

Estos sujetos no eran diferentes...lástima que las reglas impidan que los mate, pero los Zeno sama se encargaran de eso por él eliminándolos una vez que pierdan.

Harto de ver como se comían con la mirada a Karot se acercó a ella envolviendo su cola alrededor de su cintura. Karot volteo a verlo y sonrió abrazándolo. Jamás lo diría en voz alta pero en momentos como este agradecía que ella fuera más alta para así tener entre su cara los pechos de ella.

Fue satisfactorio ver como esos insectos se enfadaron al verlo con Karot. Que sepan de una vez que ella le pertenece.

Mía FINALIZADADonde viven las historias. Descúbrelo ahora