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El embarazo siempre era dificil, tanto para la madre como el padre, sin embargo...las cosas subian de nivel cuando era una saiyayin pura la embarazada.

Vegeta lo sabe perfectamente, no por nada tiene tres hijos. Asi que en teoria no deberia tener problemas enfrentando la situacion una vez mas...¿o si?

Pues parece que si, porque resulta que esta vez no era uno sino dos crias. Tal parece que su esfuerzo y celos rindieron bastante resultados.

Ahora bien, afortunadamente su mujer no era como las irritables humanas de la Tierra que eran gritonas y debiles que por la mas minima cosa podrian perder el embarazo. No, Karot no era asi, su naturaleza alegre y suave persistia...pero era justamente eso parte del ahora problema.

Ella estaba bien, calmada, demasiado calmada a su parecer. Pero Vegeta no, el estaba especialmente preocupado y no solo él...sus hijos estaban iguales.

Sabian que ella era fuerte, pero nunca antes habia estado en espera de gemelos. Es mas esa clase de embarazos en su raza eran sumamente raros. Karot resulto ser bastante fertil.

Y ahora he aqui él...arrastrando un enorme dinosaurio que cazo para darle a su compañera. Ahora tenia tre bocas mas que alimentar y no iba a traer un simple ciervo. Eso seria un insulto, ella necesitaba lo mejor y solo lo mejor. Y como proveedor le daria solo lo mejor.

Al alzar la mirada vio como sus hijos desecendian trayendo tambien consigo presas a su madre.

Sonrio satisfecho, toda esa comida sera suficiente para contentar a Karot. Y efectivamente ahi salio ella de casa, mostrando su enorme vientre bajo un vestido azul.

Se veia muy hermosa en él, y una sonrisa apareció cuando vio las presas que trajeron su compañero e hijos. A cada uno de ellos los abrazo y beso en la mejilla, para luego agarrar con prisa las presas. Pero fue detenida por ellos y la mandaron a sentarse mientras ellos preparaban los alimentos, haciendola lucir un lindo puchero. Que fue capturado por Vegeta.

Cuando la comida esutvo lista tanto para ella como a ellos, devoraron todo. El dinosaurio la dejo especialmente satisfecha, ganandose asi Vegeta afecto de ella. Sus hijos al verlos sonrieron.

Se sentian afortunados de poder ver este lado de sus padres, especialmente desu padre. Quien aunque es duro con ellos, en especial en los entrenamientos siempre en privado les demuestra que los ama, a su muy orgullosa manera.

Todo estaba bien ese dia...hasta que de repente durante la noche su madre se quejo del dolor en su vientre alarmandolos.

Resulto que sus nuevos hermanos querian salir ahora...y Vegeta presa de la preocupacion actuo torpemente ese dia haciendo reir a su madre a pesar del dolor que sentia por las contracciones.

Mía FINALIZADADonde viven las historias. Descúbrelo ahora