Amor De Chocolate

Capítulo 9

- ¡Ya estoy aquí!- gritó Robin nada más pasar el umbral de la puerta

No hubo respuesta

El chico se quitó los zapatos y se fue a la cocina

- ¿¡Papá!?- llamó, pero solo hubo silencio

Unos segundos después recordó

- Ah sí, papá tenía que ir al ginecólogo hoy - se dijo a sí mismo y se fue a su habitación

Una vez ahí, dejo la mochila en el escritorio y se lanzó a la cama

- Te echaba de menos camita- dijo estirándose en el mueble, luego miró hacia su mochila y suspiró fuertemente - puta madre que pereza- exclamó al recordar que tenía deberes que hacer

Se levantó lentamente y se dirigió hacia el escritorio

Suspiró fuertemente y abrió la mochila para después sacar un libro de texto y un cuaderno

- ¿A quién se le ocurrió que los deberes eran buena idea?- pensó- puta madre, quiero coser- empezó a hacer los deberes

Por suerte para el heterocromatico, los deberes eran cortos, por lo que no tardó mucho en terminarlos y volver a echarse en la cama

Después de un buen rato, oyó el sonido de la cerradura abrirse

- ¡He vuelto!- gritó su padre- ¿Robin?

El adolescente se fue a la cocina a recibir a su progenitor

- ¡Hola papá! - corrió a él y lo abrazo- ¿Que tal en el médico? ¿Todo bien?

- Sí, aunque la ginecóloga...

- ¿Se ha portado mal contigo?- dijo deshaciendo el abrazó, siempre era protector con su padre

- No, pero me ha echado una buena bronca por no haber ido a las revisiones periódicas

- ¿Hace cuanto que no vas?

El padre suspiró

- Pues desde hace cinco años

- Ya... bueno, emmm, he conocido un nuevo compañero hoy- dijo cambiando de tema

- ¿ En serio? Que bien

- Sí

- ¿Y el resto? ¿Cómo están?

- Genial

- ¿Pensáis en incluir al nuevo en el grupo?

Robin se quedó pensando un segundo

- No lo sé... A mí me gustaría, pero no sé que opinan los demás. Es un chico majo, pero muy callado, no sé si encaje bien en nuestro grupo

- Entiendo, solo... Tratarlo bien...- dijo el adulto con preocupación

- Por supuesto, ¿Por quien me tomas?

El padre rió

- Más te vale, en mi casa no entran bullys

- Eso ya lo suponía

- Entonces, ¿que tal el resto del día? ¿ha ido bien?

- Perfectamente ¿Quieres un café?

- Sí, gracias - suspiró fuertemente

- ¿Un día agotador?- preguntó mientras ponía el café en una taza

- Sí, y seguramente tendré que hacer horas extra durante la semana

- ¿¡En serio?! ¿¡esta semana?!

- Sí, lo siento- se disculpó - sé que habíamos quedado en que iríamos a la exposición juntos el viernes, si hay alguna manera del que te pueda compensar esto...

- Nah tranquilo- dijo sin darle importancia - puedo ir solo. De todos modos, no soy un crío

- Ya, solo que no me parece justo, es algo que te había prometido hace mucho tiempo

- Eso es verdad, pero siempre puede haber imprevistos, cosas que no puedes controlar y tú no puedes controlar que tu jefe sea un capullo

El adulto rodó los ojos, sin contestar al comentario de su retoño