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Estábamos Steve y yo en mi habitación hablando de todo lo que nos había pasado todos estos años. Cuando mi madre me llamó.
—Hija tengo una sorpresa para ti—dice ella
—Ahora vamos mamá—dije, cogí la mano de Steve y fuimos a ver la sorpresa.
Cuando llegamos había un gran bulto tapado con una lona enorme, mi madre destapó aquel bulto.

Cuando llegamos había un gran bulto tapado con una lona enorme, mi madre destapó aquel bulto

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—SORPRESA!!!—dijo ella emocionada.
—Un coche!!!—dije emocionada también.
—Bueno no todo es mérito mío, Steve me ha ayudado a comprártelo—dijo mi madre sonriente.
—Sorpresa!!!—dijo Steve emocionado también.
—Os quiero—dije mientras les daba un abrazo—Bueno, Steve quieres dar un paseo en mi nuevo coche?
—Vamos—dijo él mientras me daba las llaves del coche.
—Que os divirtáis—dijo mi madre.
Cogí las llaves y fui corriendo al coche.
—Donde quieres ir?—me preguntó Steve.
—Quiero que me presentes a tus amigos—dije
Steve me dirigió hacia donde trabajaba.

Entramos en la tienda de películas, donde se encontraba una chica de pelo corto con un montón de películas en la mano.
—Menos mal que has vuelto Steve creí que me ibas a dejar sola—dijo ella sin darse cuenta de que yo estaba allí.
—Robin esta es ___—me presentó Steve.
—Oh hola no te había visto lo siento, Steve me ha hablado mucho de ti—saludó tímidamente.
—Hola encantada de conocerte—saludé yo amablemente.
—Robin nosotros nos vamos, hasta mañana—dijo Steve.
—Si no has estado aquí en todo el día—se quejó ella
—Si quedan 5 minutos para cerrar—dijo Steve saliendo por la puerta.

Estábamos en un restaurante muy bonito la verdad, había flores, muchas plantas y luces.
—Yo voy a querer la carne a la plancha con patatas—le dije al camarero.
—Yo lo mismo por favor—pidió Steve.
Estuvimos hablando toda la cena.

Después de la cena fuimos a dar un paseo por el mirador de Hawkins, a Steve y a mí nos encantaba ir allí, era como nuestro sitio.
—Me acuerdo de que te gustaba cantar, alguna vez has pensado en dedicarte a eso—dijo Steve
—No lo había pensado, pero a lo mejor se me da bien, la verdad es que en Nueva York he escrito varías canciones—dije
—En Nueva York ha habido algo o alguien en que te hayas inspirado?—dijo Steve
—En Nueva York no, pero aquí sí— dije
—Y porque las escribiste en Nueva York y no aquí?—preguntó
—Sabes el dicho de "no te das cuenta de lo que quieres hasta que lo pierdes"—dije, y él asintió—pues cuando me fuí a Nueva York perdí a alguien que realmente quería y me sentí vacía por dentro que decidí escribir.
—¿Quien era?—preguntó Steve un poco triste
—Tú, te perdí, estuve 5 años pensando en ti y ahora que estoy aquí estoy feliz porque estoy contigo—dije
En ese momento lo único que quería hacer era besarle, pero no sabía cómo iba a reaccionar, pero de repente él se paró y fue más rápido, se dió la vuelta hacia mí, me cogió de la cintura y me besó lentamente.
—Te quiero, siempre te he querido—me dijo él
—Yo también te quiero—dije y le volví a besar
Me sentía tan bien de decirle a Steve como me sentía, me sentía en las nubes, me sentía tan relajada, sus labios eran tan bonitos y dulces.

Espero que os guste mucho 🥰🥰🥰
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El te quiero infinitoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora