La vida se fue tornando en una constante inercia, los acontecimientos no me suscitaban mayor atención y pensaba que mi propósito en la vida, no me había tocado en ésta. Sumergida en el sinsentido, llegaron a mí, almas de abundancia; quizá fue un llamado propio de mi ser, un plan previamente diseñado por alguien que desborda nuestro entendimiento, o del azar y contingencia de la vida que nos abraza con su poder. En ese momento empecé a descubrir facetas inexploradas en mí, incluso reté las creencias y paradigmas que me habían acompañado desde mi formación.
YOU ARE READING
SERENDIPIA
RandomSiempre nos podemos reencontrar y reconciliar con nosotros mismos y el mundo.