Cap 3. Alqarf

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Sus ambiciones eran grandes, tal como un niño que quiere alcanzar la luna, tal como un pájaro quiere vencer a un león, tal como un muerto que quiere volver a la vida, así era él, no aceptaba una derrota como respuesta. Y no hablo de un aburrido juego de Brawl Stars.

¿Pero y si la derrota clamaba a su puerta todos los días durante todo el día? ¿Y si la derrota jamás se iba aunque luchara? Se siente mal, como un peso que debes cargar en contra de tu voluntad, es extraño, es absurdo, es problemático.

Así se sintió él cuando por su culpa cayó su compañera de equipo en manos enemigas. Se sintió culpable, y la culpa no se iba aunque esta reviviese, no podía quitarse de la cabeza el hecho que pudo haber fracasado si no reaccionaba a tiempo.

"Suficiente por hoy" susurró para si mismo cuando ganó ese último juego de Showdown Duo.

"¡Buen trabajo!" saltando de alegría exclamaba su compañera de equipo felizmente.

Sin embargo, al salir fuera de Starr Park sus ojos se desplomaban aún más.
Esta vez percibía que en cualquier momento caería desplomado como un perro hambriento, de la misma manera sintió su estómago rugir de hambre como un oso.

Lo último que quería era que algo se interpusiera en su camino, y para mala suerte de Sandy así fue.

"Lo siento ja-ja, ¡Hicimos un gran equipo!, ¡Estuviste increíble!" le admiró ella con una sonrisa “energizante” (entre comillas.)

"Por cierto, mi nombre es Max, ¿Y el tuyo?" continuó la chica con la mano extendida, sin perder esa sonrisa determinada.

Sandy ni siquiera alzaba la vista, tal vez era porque sentía muy pesada su cabeza, o no podía porque... Era muy vago. O eso creyó Max por un segundo, hasta que él respondió:

"Gracias, Max... Tú... Eres... Increíble" frotándose un ojo sin prestar atención a lo que había dicho. Cabizbajo extendía su otra mano correspondiendo al apretón, pero al final Max notó que Sandy se había dormido
..
.
de pie.

"¿Que...?" es lo que pudo responder atónita.

Tras verlo en ese estado 'indefenso', la superheroína actuó rápidamente en ayuda de Sandy. En una banca pública se quedó junto a él como si fuesen “algo”, pero no, ella solo vigilaba como un guardaespaldas a que nadie le hiciera daño. Era evidente que a Max le disgustaban cierto tipo de miradas curiosas, así naciendo un rumor que nada más era un malentendido.

"Oh... ¡Despertaste!" decía la chica después de un buen tiempo vigilándolo, al parecer ya quería irse desde hace un buen rato.

Sandy bostezó.

"Te gusta dormir demasiado, ¿Verdad?" con una contenta mueca nerviosa le preguntó nuevamente.

"¿Qué pasó?" cuestionaba el zapatos de bufón mirando en su entorno, confundido.

"Te dormiste je-je... Estuve vigilándote a que nada malo te pasara" explicaba la chica mientras Sandy se frotaba los ojos.

"Oh... Gracias Max" agradecía él desalentado porque aún no lograba conciliar el sueño...

Sandy bostezó nuevamente.

"Veo que sigues cansado... ¡Toma!, te ayudará" le animó ella, entregándole una de sus características bebidas energéticas.

El chico arenoso aceptó el pequeño regalo.

"Me gustaría que peleemos juntos de nuevo, pero ya tengo que irme... Nos vemos, no te duermas la próxima vez ja-ja"

Dijo y corrió haciendo que Sandy la pierda de vista, sin siquiera esperar un “adiós” de él.

"Yo... ¿Me dormí...?" decayendo el ánimo se preguntaba a si mismo, pensando una vez más en la “derrota” que “clamaba” a “su puerta” era algo significativo. A veces odiaba dormir, o era el hecho de sentir sueño a cada minuto, pero así era él, así lo crearon. Una vez más se hundía como arenas movedizas en su mente, Sandy sabía perfectamente que no conseguiría nada odiándose a si mismo y así salió del trance, simplemente pensando en otra cosa como el hambre.

|Por supuesto, hambre| se dijo él, llevando la bebida energética de Max en su diminuto saco.

¿Que mejor otro lugar que Barley's?

Era algo extraño, habían Peleadores que no le quitaban la mirada en todo su camino hacia allá, especialmente uno en específico, quien parecía guardar algo en ese chaleco rojo que traía consigo.

No le dió demasiada importancia a ese sujeto pálido, pero sí miedo, tanto que sintió su presencia detrás de él y giró la vista un par de veces para asegurarse que estaba en un error.
Fue así todo el camino hasta finalmente llegar a la cantina.

Cuando Sandy abrió la puerta se sintió mucho más observado que antes. Varios Peleadores, incluso celebridades como El Primo Gonzales se encontraban ahí.

Él solo quería comer tranquilo, él adora la tranquilidad, aunque se alivió que no pasara nada en absoluto, nadie lo saludaba ni lo molestaba.
Luego de un rato Barley se acercó para atender a nuestro querido Sandy luego de limpiar unas mesas.

"¡Bienvenido otra vez a Barley's! ¿Que va a ordenar?" preguntó el cantinero caballerosamente sosteniendo su característico trapo de limpiar.

Sandy respondió:

"Hola, yo... Voy a querer un, ahh... ¿Los fideos con-"

"¡Enseguida!"

Siendo interrumpido por el dueño aún feliz y anotando la orden en un cuadernillo.

En eso, el peli-morado se sentó en la mesa vacía más cercana, apoyó su cabeza en la mesa sintiendo su humedad ya que, bueno, tenía sueño.

Barley no quiso despertarlo, más bien no del todo, porque la comida se iba a enfriar. Aún así lo dejó dormir un poco para su comodidad en la taberna, después de todo los lugares así son para descansar... No literalmente como lo hacía el joven egipcio, pero de todas formas Barley lo sintió así.

Él solo dejó el almuerzo en la mesa de roble y continuó con su labor.
Por supuesto, Sandy despertó momentos después gracias al olor de la pasta italiana con albóndigas y la devoró en unos minutos.

Satisfecho por el servicio dado, el joven pagó lo debido y se fue así sin más, cuando se dió cuenta que ya estaba anocheciendo.

|¿Cuánto tiempo estuve ahí...?| se preguntaba en su mente

|¿Donde voy a dormir...?| se siguió preguntando en el frío del anochecer.

Y las preguntas eran constantes como su andar, solo que andaba sin rumbo. Es decir, caminaba sin saber a donde, y solo buscaba un sitio donde quedarse a dormir, un hotel, un alojamiento, LO QUE SEA, aunque sea un callejón, pero no podía quedarse así como un idiota esperando morir de hipotermia.

La noche era visible, el sol se había ocultado en su totalidad. Tara sintió una ligera preocupación cuando no vió a Sandy por ningún lado, ¿No se supone que eran un equipo?
¿Ella no le había dicho que Sandy volviese a casa antes que se ocultara el sol? ¡Pero claro que así fue...! Si tan solo ella pudiese usar palabras y no sonidos inaudibles.

Asimismo, Nita lo estaba vigilando a lo lejos, no era porque se enamoró de él o algo por el estilo. Es decir, literalmente ella trató de atacarlo y él... ÉL... No dejó que pasara hambre...
Se sentía una malagradecida, pero su orgullo era mucho más fuerte que eso, así decidió protegerlo solo una vez desde la distancia.

Mientras que Sandy estaba soñando despierto, trataba de caminar, o aunque sea de mover el pie izquierdo. Pero no, ya no podía más, su respiración pesada, el frío y pesadez en los ojos, sus pies pegados al suelo como si fueran cemento, era el fin.

A lo lejos, algo o mejor dicho ALGUIEN se acercaba a Sandy. Sus guantes de cuero preparaban a lo que parecían ser puños hambrientos de dolor, su cabello que tapaba su ojo izquierdo parecía arder de furia, su ojo visible fruncía el ceño como el resto de su cara no visible, y su bufanda... Tenía sed de sangre.

¿Pero por qué a él...?

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Gultax7
Primer seguidor ❤️.

Brawldisea 2. Osos y Estrellas (Nita x Sandy) Brawl StarsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora