No soy una persona excesivamente alegre pero últimamente estoy más feliz de lo normal. Al final me he decidido a ir a la fiesta de Cris este fin de año, hecho que a mi madre no le importa demasiado. Dice que al fin y al cabo soy una adolescente, que pronto cumplo los 18 y que tengo que aprovechar ahora que soy joven. No estoy muy segura de lo que estoy haciendo, si soy totalmente sincera.
Es cierto que estos días me encuentro especialmente contenta comparado con lo que suele ser mi estado de ánimo pero es cierto que desde hace una semana Asier anda muy raro y me tiene bastante preocupada. A veces es exageradamente borde conmigo y parece que ya no confía en mi. Por mucho que le pregunto dice que no le pasa nada y que solo anda estresado con el instituto, razón que siento más como una excusa que una explicación, y no quiere hablar de ello. Entiendo que las parejas a veces tienen situaciones de crisis, situaciones en las que algo falla en una de la dos bandas y los dos lados tienen que hacer por reparar el problema y es imposible ayudar cuando la otra persona te evita.
Dicen que el verde representa los celos y la envidia. No me considero celosa, ya que nunca tuve ningún problema de este tipo con Asier. Sé que es una persona fiel en el sentido de no engañar a quien le rodea, y es lo que más admiro de él. Desde el año pasado que estamos juntos nunca me importó que saliera con sus amigos o amigas sin mi. Al fin y al cabo yo hago lo mismo con Cris de no avisarle para tener nuestros planes juntas. De hecho, tengo pendiente ir con Cris y sus amigas a comprar un par de cosas para la fiesta y ya de paso comprarme un vestido o algo, que no tengo ninguno de mi talla por casa.
No soy una persona celosa, pero es cierto que a lo largo esta semana sentí como si algo estuviese formándose dentro de mi pecho. Sentí algo que nunca en mi vida había sentido antes y eso me asusta mucho.
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Las mentiras que un día creí
No FicciónCuando somos pequeños siempre creemos todo lo que nos dicen. Todo lo que vemos y creemos es real hasta que nos digan lo contrario. A veces, sin uno darse cuenta, la verdad es completamente distinta a lo que creemos y no es más que un juego en el que...