(temp-3) 1 - por que lo hiciste?

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Narra spreen:

Otra maldita misa!, bueno tengo que ir si o si, después de todo, me extraña no ver a quackity pegado a luzu como un chicle, tal vez lo vea en la misa, o yo que se.

Desde de unos minutos caminando hacia la iglesia de profeta ví a Juan y Auron llendo también a la iglesia, parecían estar hablando ¿de quackity?, ¿que tenía que ver el? ¿Acaso su desaparición repentina había causado esa platica?.

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-¡Pero donde se habrá metido ese pato!- Auron

-¿Y TENGO CARA DE SABER?- Juan

-¡Hombre!, ¡pero no grites!- Auron

-Ya qué...- Juan

-Oye juanito- Auron

-¿Mande?- Juan

-Nunca te había preguntado sobre ese collar, ¿como lo conseguiste?, es que se ve como el de los adinerados del pueblo- Auron

-¡Oh!, el collar me lo dio una persona un tanto especial, pero es un larga historia- Juan

-No me convences para nada, pero bueno, ya llegamos a la misa... Que emoción... - Auron

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¿Collar? ¿Alguien un tanto especial?, ahora que lo pienso bien, ese collar que siempre lleva el mago de cumpleaños me parece algo familiar, siento que ya lo he visto, ¿pero de donde?. Pero de una cosa si estaba de acuerdo, lamentablemente, ya había llegado a la iglesia del profeta, genial... Me había distraído tanto que ni siquiera me di cuenta de cuando llegue.

Cuando por fin entre a esa tal iglesia, me senté  en el mismo lugar, uno alejado del profeta para no recibir sus miradas o para simplemente no prestar atención a la misa, estaba tan perdido en mis pensamientos y sobre el tema del collar de juan, lastimosamente, cuando por fin mis pensamientos se aclararon, escuche al profeta llamar a su hijo, ¿tenía un hijo?.

"Les presentó a mi hijo, Alex quackity", tan solo unas palabras habían bastado para alborotar a todo el pueblo, susurros y miradas de desaprobación se dirigían hacia quackity, mi socio, mi mejor amigo, también pude notar su mirada de miedo, ¿acaso no sabía lo mal que todos podían reaccionar? Oh... ¿Que se supone que debería de hacer ahora? ¿Seguirle la corriente a los demás, defenderlo?, mi cabeza daba vueltas... Muchas vueltas.

De pronto, mi vista se nublo, y mi hermano apareció en medio de la oscuridad, "defíendelo" me dijo y todo volvió a la normalidad, de pronto una sensación de tristeza y de proteger a quackity llenaron mis pensamientos, me levante de mi asiento inconscientemente, y grite.

¡Ya basta!, ¡hagan silencio!

¿Enserio defendí al hijo de uno de mis mayores enemigos? Si... Y no me arrepentiría nunca. Las miradas entonces voltearon a verme, en especial la de Juan, quien me veía de una forma que decía "¿estas loco?¿que es lo que haces?", para entonces, los ojos ya cristalinos de quackity también, pero los de el me trataban de decir "gracias", ahora... Te estarás preguntando ¿que paso con el profeta? ¿A donde se fue?, simple, el profeta estaba parado a un lado de quackity sin decir nada, no se movía ni hacia algo para que las miradas o susurros paren, como si fuera un simple árbol.

NO SOY HIJO DEL PROFETA!! (Cancelada) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora