Ryan
Han pasado los años, nuestra pequeña niña ya esta con nosotros. Holly Scoth Collins , es una pequeña encantadora, tiene unos hermosos ojos azules como los de su hermosa madre. Una sonrisa muy cautivadora y mis oyuelos, es la concentida de la casa..—Mamá!—Chillo la pequeña—
—Holly, dejame terminar—Sam luchaba por cepillarle su cabello—
Al mirar la escena , no me contuve y me reí
—Papá ayudame!—Holly hizo un mojín y yo avancé para cargarla—
—Haber nena, Mama solo quiere ponerte mas hermosa de lo que ya x—Le sonreí y ella se tranquilizo—
Sam acabo de cepillarla y fui con ella para dejar un beso en sus hermosos labios.. dios esta mujer me vuelve mas loco cada día.
—Iu!—Chillo la pequeña y ambos nos reímos—
—Vamos a comer—Fuimos a la mesa y Sam sirvío la comida—
—Mama, cuando acabemos de cenar. Podemos ir a la torre Eiffel?—Holly jugueteo con sus piernitas—
—Claro, pero solo si te acabas todo el plato. Trato?—Levantó su meñique—
—Trato—Holly le siguío su juego—
—Ustedes dos , son increíbles par de consentidas—Ambas sacaron su lengua—
—Culpa suya señor —Dijo Sam mientras Holly se apegaba a ella—
—Mami , porque no tengo abuelos?—Holly nos miro—
Sam medio sonrío
—Princesa porque, tus abuelos.. murieron antes de poder conocerte. Yo tenía 19 años cuando eso ocurrío y tu papa , fue de gran ayuda para superar esa pequeña grieta..
—Ellos son angelitos que nos cuidan desde el cielo , verdad papi?—Le sonrío—
—Si princesita— Beso su frente—
Ella al rato se safo de sus brazos y corrio a jugar con sus muñecas, Ryan me abrazo por la cintura y me miro
—La nueva integrante es muy traviesa, igual que su madre —Yo lo mire indignada y el se río— era broma pequeña, te amo.
—Yo tambien te amo, Daddy—El sonrío y me dio una pequeña nalgada—
—Como en los viejos tiempos, Princesa
Nuestra historia , empezó con un simple acuerdo y continúa con un amor intenso y peculiar.. en el cual lo seguire llamando
Daddy
Fin