Del Odio Al Amor (The Umbrella Academy)

22

- Dímelo tú.

Saco el pedazo de piel.

- ¿Trajiste eso? - pregunto Tn.
- Así es.
- Parece mi trabajo - lo tomo- pero jamás hice ese tatuaje.
- Aún no lo haces, lo corte de mi versión de 100 años.
- Ah desesperado entonces.
- Lo estarías si supieras que el universo corre peligro.
- Entonces, ¿ya paso?
- ¿De qué hablas Pogo?

Saco un libro.

- ¿Te resulta familiar?
- A mi no.
- Reggie estaba obsesionado con estos símbolos, es un sello, un símbolo que se cree que tiene poderes mágicos.
- Papá creía en la ciencia, en los hechos- dijo Tn.
- Tn tiene razón, no representaba mucho al viejo pero si respetaba eso, la magia no le interesaba, debe tener un significado lógico.
- No se mucho pero él lo llamaba Proyecto Oblivion.
- Carajo - dijo Tn- necesitamos saber más sobre ese proyecto, cuéntanos más por favor Pogo.
- De acuerdo pónganse cómodos.
- Ok.

Nos dio un trago a cada uno.

- Gracias.
- Era una misión kamikaze, el preparaba a los chicos Sparrow a sabiendas que quizá no volverían, por eso les di esas pastillas para mantenerlos a salvo de él.
- Y mi hermano drogadicto lo ayuda a estar sobrio, que ironía.

Narra Tn

- Carajo, esto no es bueno.
- Entonces, el Proyecto Oblivion está en marcha y todos están en peligro- nos apunto.

Y nos tomamos el trago de uno.

- Debería hacerme ese tatuaje, para completar el ciclo.
- ¿Estás seguro? - tome su brazo.
- No creo que al destino - se comenzó a desvestir - le importe si lo estoy.
- Es una zorra cruel, ¿No?  - dijo Tammy.

Camino hacia mí y Pogo hacia Cinco.

- Tienes mucha razón querida.
- Bueno entonces comencemos.

Tammy se sentó junto a mi y me dio otro trago.

- Y dime Tn, ¿Cierto?
- Si, dime.
- ¿Cómo es que tienes a ese hombre a tu lado?
- No tengo ni idea, pero sé que me encanta.
- Pues tienes suerte, y me caes bien.
- Tu igual Tammy, cuando quieras podemos hablar.
- Igual linda.

Después de un rato termino.

- Y el que dijo que no terminaría con un tatuaje de vago, jajaja, le diré a Klaus.
- Silencio nena - me abrazo- es hora de irnos.
- Muchas gracias Pogo.
- Cuídense, y Tn, intenta volver a darle a Reginald esas píldoras.
- Lo intentaré, y nuevamente gracias.

Nos fuimos de ahí rumbo al hotel.

Continuará...