Nano Machine

Capítulo 66. -Esta etiqueta es tuya (4)-

Temprano en la mañana, en el pico de la montaña detrás de la Biblioteca de la Academia Demoníaca, la niebla matutina cubría la parte inferior de la montaña. Tres hombres corrían montaña arriba con sus habilidades de ligereza. Eran instructores de la academia. El que estaba al frente era el ex instructor del octavo grupo, Impeng. La razón por la que iban a subir a la montaña hoy era porque el encarcelamiento de Yeowoon estaba programado para terminar.

'Me pregunto si lo soportó bien.'

Incluso un adulto más experimentado tendría dificultades para estar encerrado solo en un lugar oscuro. Sin embargo, la persona que encerraron era un chico de quince años, lo que generó algunas preocupaciones. Pronto llegaron al frente de la cueva.

"¡Señor!"

Los guardias que estaban cerca de la entrada saludaron a los instructores. Impeng asintió.

"El encarcelamiento de Cheon Yeowoon ha terminado. Abran la puerta."

"Sí, señor."

Luego, los guardias movieron el mecanismo de bloqueo de la roca gigante que bloqueaba la entrada y la empujaron hacia un lado. Cuando fue empujado, la cueva se abrió. Con el aceite de la lámpara agotándose, el interior de la cueva estaba completamente oscuro. Pasar cinco días en un lugar así seguramente enojaría a alguien. Mientras miraban adentro, un chico en toples estaba sentado con las piernas cruzadas y los ojos cerrados en meditación.

"¡7mo cadete, ahora estás siendo liberado!"

Uno de los instructores gritó y Cheon Yeowoon abrió los ojos. Finalmente llegó el momento que había estado esperando. Se levantó y frunció el ceño porque la luz era demasiado brillante en sus ojos y salió.

'¿Eh? ¡Mira su cuerpo!'

El cuerpo en toples de Cheon Yeowoon mostró todos sus músculos tensos. Era difícil creer que eran los músculos de un niño que no había crecido del todo. Los instructores se quedaron atónitos. Pero lo que realmente asombró a Impeng fueron los ojos de Cheon Yeowoon.

'¿Son estos los ojos de un niño que estuvo encerrado solo en prisión durante cinco días?'

Sus ojos eran más profundos y decididos que cuando estaba encerrado. Era como si Yeowoon hubiera encontrado la verdad después de un duro entrenamiento. Impeng estaba asombrado, pero no lo demostró y le habló.

"¿Dónde está tu mejor ropa?"

"Eh, eso es..."

Cheon Yeowoon luego regresó y sacó su ropa. El hedor hizo que todos los instructores fruncieran el ceño con disgusto.

"¡Puaj!"

"¡Qué le hiciste a tu ropa!"

El instructor Simong arrebató la ropa y la arrojó lejos. Impeng suspiró, se quitó la túnica exterior y se la entregó a Yeowoon.

"Oh... gracias, señor".

Yeowoon luego comenzó a ponerse la ropa y Simong miró dentro de la cueva, comprobando si había hecho algo dentro. No había rastro de nada dentro. Simong asintió a los otros dos instructores y comenzaron a bajar la montaña.

Pero Simong se había perdido algo allí. No había notado las rocas que se habían apilado para bloquear el agujero en el fondo, cerca de la profunda pared interior. La luz no llegó a esa área, por lo que Simong no se dio cuenta de esto.

'Uf.'

Yeowoon suspiró aliviado. Esperaba que Simong no entrara en la cueva para comprobar el interior y, afortunadamente, no lo hizo. Cuando comenzaron a descender, los guardias que estaban al frente sellaron la cueva nuevamente y se sonrieron unos a otros.

"¡Terminamos!"

"¡Hurra!"

Gritaron de alegría. La misión especial que les fue asignada para hacer guardia día y noche finalmente había terminado. Los instructores sonrieron ante el sonido de alegría proveniente de la cima de la montaña.

"¿Puedo preguntar algo, señor?" Yeowoon le preguntó a Impeng mientras bajaba. Impeng asintió.

"¿Cuántas etiquetas amarillas quedan?"

Impeng sonrió. El niño estuvo encerrado solo durante cinco días y su primera pregunta fue sobre la cantidad de etiquetas amarillas disponibles. Esto significaba que Yeowoon aún no se había rendido.

"Queda una".

"¿Una?"

El rostro de Yeowoon se oscureció ante la palabra. Pensó que no quedarían tantas etiquetas ya que solo quedaba un día para tomar las etiquetas, pero no pensó que solo quedaría una.

"¿El que está en manos de él?"

Impeng sabía de quién estaba hablando Cheon Yeowoon. Estaba hablando del instructor principal Hou Jinchang. Impeng asintió.

'Es como pensaba.'

Obtener la etiqueta amarilla de Hou Jinchang era imposible para cualquiera. Impeng habló con Yeowoon.

"Estoy seguro de que sabes que esa no es la única etiqueta que puedes tener en tus manos".

"...Sí."

No lo dijo directamente, pero estaba hablando de las etiquetas de los otros líderes. Era lo que se recomendaba extraoficialmente, pero no era algo que un instructor pudiera decir en voz alta.

'Atacar a otros cadetes...'

Cheon Yeowoon estaba sumido en sus pensamientos mientras bajaba la montaña. Cuando llegaron al pie de la montaña, los instructores le dijeron a Yeowoon que ahora era libre de hacer lo que quisiera. Yeowoon luego siguió a los instructores al edificio principal. Cuando llegaron al frente del edificio principal, Impeng preguntó con curiosidad: "¿Quieres decir algo?"

"Yo... tengo una petición que hacer".

"¿Solicitud?"

"¿Puedes llamar al instructor que tiene la última etiqueta amarilla?"

"¿Qué?"

Impeng frunció el ceño ante la repentina solicitud de Yeowoon. No creía que Yeowoon los estuviera siguiendo para intentar quitarle la etiqueta amarilla al instructor principal. No le quedaba tiempo, pero no creía que Yeowoon intentara luchar contra Hou Jinchang justo después de que saliera de la cueva. Sin embargo, quien le respondió no era Impeng.

"¿Estás loco? No seas imprudente y encuentra algo que puedas hacer en su lugar".

Fue Simong quien respondió. No le importaba Cheon Yeowoon, pero incluso él podía ver que luchar contra Hou Jinchang era imposible. Si Yeowoon se lastimara al intentar luchar contra Hou Jinchang, eso significaría el final de su prueba. Impeng también pareció estar de acuerdo con esto y asintió.

"No te excedas. Sé que te estás quedando sin tiempo, pero debes tener cuidado".

Impeng pensó que la decisión de Yeowoon provenía de la prisa. Conocía la situación, pero esperaba que Yeowoon no se pasara de la raya. Sin embargo, Yeowoon no cambió de opinión.

/Hola, primero que nada quiero agradecer a las pocas personas que leen esta novela, gracias.

Estos días estaré subiendo más capítulos, ya que ahora tengo mas tiempo libre. Adiós uní siu/