Mi pequeño amor prohibido - KookMin 🔥 (+18) - HP9.1

5. Al límite

Besé a Jimin, y poco a poco me fui deslizando hasta su erección, chupé y lamí, terminando lo que habíamos comenzado hacía algunos minutos. Jimin alcanzó el orgasmo, me bebí todo su semen, hasta la última gota, suavemente separé sus piernas y levanté sus nalgas, de manera que pude pasar mi lengua por su parte trasera, apartando un poco más las nalgas, mi lengua se abrió paso entre ellas, lamí muchas veces, cuando estuvo bastante húmedo, empecé a explorar con mi dedo medio, con suaves movimientos fui suavizando y destensando la zona, besaba las piernas de Mochi y él se estremecía al sentir mis labios sobre su piel. Poco a poco mi dedo se fue abriendo paso en su interior y su ano lo absorbía sin problema.

Sentía como se retorcía de placer, mientras lo embestía con un dedo, así que ingresé otro más en su orificio. Ya eran dos y el placer, claramente se reflejaba en su rostro y en los sonidos que escapaban de su boca. Un dedo más entró y con cada embestida, veía como el pene de Jimin, volvía a cobrar vida y el mío, estaba chorreando, necesitado, queriendo ocupar su lugar en el delicioso trasero de mi profesor.

Desinhibidos por completo, todo fluía casual, tomé a Jimin y lo coloqué sobre sus rodillas, levanté su hermoso trasero, separé las nalgas y alineé mi pene contra su entrada. Despacio, me fui empujando dentro de él, primero la mitad de mi pene, porque él era tan estrecho. —nunca había estado con un hombre, yo lo sabía bien. Tenía la misma novia desde la secundaria y ella era un ser insufrible, lo había engañado muchas veces, pero, aun así, por cubrir las apariencias Jimin tenía que casarse con ella— Estaba tan caliente, su canal absorbía mi pene, como si supiera que ese era su lugar.

Cuando todo el largo de mi pene logró penetrarlo, empecé un suave vaivén, entraba y salía lentamente, no quería lastimarlo. Pero el movimiento de su trasero, al encuentro de mi pelvis, me indicaba que Jimin deseaba que fuera más rápido y profundo. Así lo hice. Empecé a embestirlo con gran velocidad, dándole la posibilidad de disfrutar a fondo de esta nueva experiencia, conmigo. Mojado y lubricado, su ano dejaba salir y entrar a mi pene sin dificultad, cada embestida iba más profundo y los gemidos de Jimin iban en aumento. Se empujaba contra mí pidiendo más, y yo estaba extasiado, excitado y verdaderamente enamorado de ese momento.

—Oh Mochi, tenerte así me encanta. Sentir mi pene apretado en tu hermoso culo. Realmente me encanta.

—¿En serio te gusta que lo apriete así? —Él contraía su recto y esfínter.

—Me encanta... sí... si continúas... Ahhh ¡Me harás terminar!

—¡No! ¡Quiero más! Sácalo y vuelve a meterlo, suavecito...

Mochi estiró su mano y tomó mis testículos, masajeándolos y llevándome al límite.

Entré con fuerza en él, luego de haber sacado mi pene hasta la mitad y él gritó tan fuerte que me hizo estremecer.

—¡Kookie Dios... mío!

—¿Así te gusta cariño?

—Lo hace, que rico se siente... Ahhh, me estas rompiendo el culo.

Jimin estaba muy excitado, empezaba a decir incoherencias y a maldecir. Llevé mi mano hasta su erección y empecé a bombearla, estaba tan mojado, muy erguido, claramente inflamado, señal de que estaba próximo un nuevo orgasmo.

Aceleré el ritmo de mis embestidas, al mismo tiempo que masturbaba su pene. Él empezó a mover sus caderas, quería que lo embistiera más fuerte. El sudor empapaba mi rostro y las gruesas gotas caían en su espalda.

Jimin también transpiraba.

La combinación de sus gemidos, mis embestidas, los movimientos sin control de su pelvis, y mi mano bombeando su pene nos hicieron estallar en un orgasmo conjunto.

Yo en su apretado culo, y él en mi mano.

𝕰𝖛𝖎𝖎 𝕭𝖑𝖚𝖊 ʚĭɞ