17: He's making me feel weird things

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Cuando estamos sentados en la mesa, uno junto al otro, me dedico a observar la carne sobre mi plato con absoluto pavor

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Cuando estamos sentados en la mesa, uno junto al otro, me dedico a observar la carne sobre mi plato con absoluto pavor. La textura luce desagradable, y ni siquiera lo he logrado disimular con pan y lechuga. Jungkook ya se encuentra devorando su Risotto, y el desespero con el que come me hacer preguntarme si al menos compro algo de camino a la universidad. Tragando saliva, decido cerrar los ojos y esperar lo mejor. Doy un bocado, lo más grande que mi boca permite, y empiezo a masticar sin concentrarme demasiado en el sabor. La consistencia es viscosa, húmeda, deslizándose entre mis dientes con dificultad. Trago antes de haber masticado correctamente, y empiezo a toser. Jungkook entra en pánico y me entrega el vaso de limonada. Siento un déjà vu de lo que pasó en la mañana, pero esta vez ni siquiera me molesto en intentar alejar la mano de Jungkook cuando empieza a dar palmaditas en mi espalda. Sigo tosiendo a propósito en un débil intento de deshacerme del horrendo sabor.

—Mierda —digo, sacando la lengua y con los ojos muy abiertos. Mi expresión de disgusto debe ser un espectáculo absoluto, porque los labios de Jungkook amenazan con curvearse hacia arriba— Mierda, mierda, mierda. Eso fue espantoso. Eso fue... completamente asqueroso. ¿Quién compraría esta atrocidad?

—Me parece que un sujeto llamado Kim Taehyung lo compró esta tarde —finge estar pensativo, con una sonrisa inocentona cruzándole toda la cara. Le doy un golpe en el hombro, fastidiado, y Jungkook solo empieza a reír mientras pasa su mano hasta mi hombro y le da un pequeño apretón—. Lo siento, lo siento, estaba bromeando.

—Ja, ja. Qué gracioso.

—¿Quieres que compartamos el Risotto? Aún queda bastante —señala con la cabeza su plato. Ha devorado una buena parte, pero es cierto. Aún queda un poco más de la mitad, y no puedo negar que el plato se ve tentativo. Más aún cuando acabo de probar intestinos de vaca. Jungkook vuelve a apretarme el hombro, acercándome un poco a él—. Estás a punto de babear, Taehyung. Cómelo, yo ya estoy lleno.

—No, no. Estoy bien —me intento justificar—. Es tuyo, Jungkook. Me haré responsable de mi error —me levanto de la mesa, llevando mi plato hasta la cocina, mirando fijamente a Jungkook. Presiento que el simple hecho de mirar el Lampredotto de nuevo va a hacerme vomitar, así que decido concentrarme en algo un poco más... lindo. Él también me sigue con su mirada, poco convencido— Recuérdame nunca volver a pedir esto cuando vayamos a The Grand Mozzafiato. La próxima vez pidamos una pizza. Sin complicaciones —digo, inclinándome sobre el bote de basura y tirando lo que queda en mi plato. Parpadeo, incrédulo, cuando analizo lo que acaba de salir de mis labios.

—La próxima vez —repite Jungkook, sonriendo—. Sí, la próxima vez... —se pone de pie, y sus ojos no dejan de brillar— ¿Estás seguro de que no quieres esto? —levanta su plato en el aire— Es muy tarde como para cocinar algo más.

—Puedo hacer un sándwich en cinco minutos.

—¿Entonces qué haré con esto? —camina hacia mí, mirando el Risotto con gesto teatral— ¿Debería tirarlo? Sería una pena desperdiciarlo, pero estoy tan lleno... —sus labios se curvan hacia abajo, al igual que sus cejas. Clava su tenedor en un champiñón y luego recoge una gran cantidad de arroz, acercándolo a mí— Salva a los champiñones, Taehyung. Sálvalos.

—Vamos, Jungkook —empiezo a reír nerviosamente, apartando su brazo y girando la cabeza. Él se mantiene firme, acercando el tenedor aún más a mí, al punto en el que puedo sentir el arroz pegajoso rozándome la mejilla— No seas ridícu-

Me engulle el Risotto antes de que pueda seguir hablando. Las palabras quedan atrapadas entre pedazos de champiñón y queso, y percibo finas rodajas de cebolla también. Empiezo a masticar. Wow. Está bueno. Está muy bueno. Le doy a Jungkook la sonrisa más sincera de la noche, y él ríe por lo bajo.

—Te lo dije. Sabía que te iba a gustar.

—Dios... Dios, Jungkook. ¿Por qué nunca probé esto antes? He ido un millón de veces a ese lugar, ¿por qué nunca lo pedí antes? A mi madre le habría encantado.

—Es lo que se pierde la gente que va a restaurantes italianos a pedir pizza. La pizza es aburrida, es ordinaria. La cocina italiana tiene un sinfín de posibilidades, ¿por qué limitarse a la pizza?

Sonrío.

—¿Entre ese sinfín de posibilidades está el Lampredotto?

Sonríe también, encogiendo los hombros.

—Hay excepciones. Ahora —vuelve a cargar el tenedor con una enorme cantidad de arroz y dos champiñones esta vez—, abre la boca. Di ah —dice, alargando la sílaba y pinchándome los labios con el tenedor. Los mantengo cerrados, casi sellados, mientras los aprieto en un intento de no reír. Doy un paso hasta atrás, dejándolo con el tenedor en el aire.

—¿Vas a tratarme como un bebé? ¿Tengo que recordarte que soy mayor a ti?

—Quiero asegurarme de que comas —frunce el entrecejo, y da un paso hacia mí, volviendo a atacarme con el tenedor—. Deja de ser tan obstinado, Taehyung. Di ahhhh.

No puedo evitarlo, y empiezo a reír a carcajadas. Jungkook también ríe, y aprovecha la oportunidad para llenar mi boca con el Risotto. Soy incapaz de dejar de reír. La situación es tan absurda. Acabo de escribir hace menos de una hora en la bitácora que Jungkook probablemente sea un vampiro, y ahora estoy riendo con él en la cocina mientras me alimenta como a un niño pequeño. Cuando terminamos, hacemos turnos para lavar los platos, y Jungkook me abraza de nuevo antes de volver a nuestras habitaciones. Apenas puedo dormir. Una sensación abrasadora en mi abdomen no me deja en paz. Es como si mi estómago estuviera hundido en una caldera caliente.

Es como si mi corazón estuviera hundido en una caldera caliente.

Doy vueltas en la cama una y otra vez. El reloj marca las tres de la mañana cuando empiezo a caer rendido.

Mi corazón está ardiendo.

Por Jungkook.

Despierto con el corazón rebotando contra mi pecho y con la respiración desenfrenada una hora después. No fue una pesadilla, pero definitivamente fue un sueño... extraño.

Y definitivamente Jungkook estaba en el sueño, pero apenas logro recordar de qué trataba.

Escucho ruidos fuera de la habitación. Pasos.

No logro conciliar de nuevo el sueño hasta que llega la mañana.

No logro conciliar de nuevo el sueño hasta que llega la mañana

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¡¡Taehyung está (lenta y progresivamente) entrando en razón!! ^^;

¡Nos leemos luego!

— Noduru.

He's clearly a vampire • KookTaeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora