Su voz era hermosa como el canto de alguien celestial. Su presencia es abrumadora de una forma encantadora. Sus manos son ásperas como su pasado, sus raíces. Sus ojos son parte de la verdad que todavía no está listo para decir, está bien, supongo.
Todo de él es simplemente él.
Sin embargo, después de ver las cosas buenas solo quedan malas, es lo que nadie dice, lo que ninguna persona que lo conozca quiere saber.
Esa voz ha maldecido a miles de personas, han herido el corazón de muchos. Su presencia causa escalofríos cuando no hacen lo que él quiere y se impone ante ti con la determinación de hacerte entrar en razón. Sus manos son el reflejo de todo el trabajo que lleva acabo para que nadie descubra su verdadero ser intentando ser perfecto. Sus ojos reflejan lo herido y malditamente loco que estaba, habían presenciado tantas cosas que ni la más macabra le impresionaba.
Todo de él es complicadamente él.
Cuando lo conocí no sabía en que diablos me estaba metiendo, no me di cuenta hasta cuando ya no podía escapar de su fría mirada ni de sus ásperas manos.
Ya no me sentía libre, nadie se sentía así luego de la aparición de él en sus vidas. Es que no entiendo cómo pude caer ante su encanto después de escuchar mil y una cosa de él.
Me advirtieron en qué me estaba involucrando, no creí, sencillamente porque me hizo sentir bien, porque había alguien en quien confiar. Pero entendí porqué no había más que caos a su alrededor, tardé, pero lo hice.
Dolió como la mierda, me destruyó en mil pedazos y no estoy segura de poder volver a levantarme.
Miro mi pasado y quisiera darme un zape por lo estúpidamente manipulable que fui en ciertos sentidos, pero que iba a hacer... me atraía su misterio.
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Encantos Manipulables | Saga Encanto #1
Ficção AdolescenteMe creé muchas imágenes imprudentes en mi cabeza cada vez que lo veía, tal vez ese fue mi error. O fue su sonrisa angelical que podía cambiar en dos segundos. No lo sé. Pero el padre Abel no me dejará con la duda, necesito saciar mi curiosidad a qué...
