Cinco

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Siete de la mañana y Yoongi estaba sentado en el sofá de la casa de Nayeon. Estaba con su cabeza gacha, mirando sus zapatos de charol; mientras TaeHyung estaba platicando con su aún esposa en la cocina.

- ¿Vienes a pedir una disculpa? - cuestionó Jennie bajando los escalones.

Yoongi no respondió, sabía que si le respondía inmediatamente Nayeon saldría a defenderla y TaeHyung para no quedar mal con si hija se podría de su parte. Sería pelear con ellos tres el sólo y ya no quería problemas.

- Contesta - ordenó jalando el cabello de Yoongi.

- Sí... Vine a pedir una disculpa - hablo intentado que la menor dejara en libertad sus mechones de pelo.

- ¿Qué está pasando aquí? - la dura voz de TaeHyung se hizo presente en la sala.

Jennie inmediatamente soltó el cabello de Yoongi y volteo a ver a su padre.

- ¡Papi! Estaba ayudando a Yoongi con su peinado, ya necesita un corte. ¿No crees? - hablo sonriendo.

- Como sea. Yoongi pídele disculpas a Jennie por lo de ayer - ordenó sentándose en el sillón.

Yoongi asintió levemente, se arrodillado ante la hija de su alfa y con al cabeza gacha susurro un 'lo siento' apenas audible para Jennie.

- Si no lo haces bien no te vas a parar del suelo. Dilo bien, Min - amenazó mirándolo fijamente

- Lo siento mucho Jennie, mi intención nunca fue tratarte mal - dijo con voz temblorosa y aguantando sus lágrimas.

- Te perdono Yoonie, pero no me vuelvas a tratar mal - hizo un leve puchero.

- Yoongi puedes irte a casa, yo comeré con mi familia. - se levantó del sillón sin mirar a su "Omega".

- Eres tan patético, solo das lastima. - comento una vez vio a su padre salir de la sala.

Yoongi limpio sus lágrimas, se levantó y salió de esa casa.

"Mi familia" esas palabras no salían de su cabeza.

- Necesito ir a confesarme - dijo y camino hacia la iglesia del padre Kim.

Entro, rezo un poco y después fue con el padre.

- Yoongi... ¿Que haces tan temprano aquí? - pregunto amablemente el padre.

- Yo vine a confesarme - respondió

- Bien, sígueme - empezó a caminar hasta una banca de las pequeñas bancas de la iglesia.

Tomaron asiento y Yoongi suspiro un poco.

- Últimamente he estado pensando en dejar a TaeHyung e irme a la casa de mis padres...

- ¿Por qué tienes esos pensamientos?

- Amo a TaeHyung, pero el me humilla, me golpea, me trata mal y le cree más a su hija que a mí. Lo entiendo, son su hija pero yo soy su pareja predestinada se supone que yo soy su prioridad... Pero solo me trata como un objeto.

- TaeHyung es una persona difícil y más siendo un alfa... No sé porque te trate de tal manera pero no permitas que te siga tratando como si no tuvieras sentimientos. Dime Yoongi, ¿TaeHyung a intentado marcarte?

- Nunca lo ha intentado, siempre que intento hablar sobre eso me responde que sigue casado con Nayeon y que no puede dar una mala imagen al pueblo.

- ¿Quieres seguir a lado de TaeHyung a pesar de que te trate de esa forma?

- No... mi lobo se pone muy triste cada vez que me Tae me trata así. Yo ya no quiero seguir con él, aunque mi lobo quiera seguir junto a él, yo no puedo permitir que me trate de esa forma.

- Entonces dile que te deje libre... Que te deje ir con tus padres.

- Intentaré hablar con él, padre.

- No permitas que te siga tratando así, por favor.

- Está bien, padre. Gracias y tenga un bonito día - sonrió cálidamente y salió de ahí a pasos lentos.

- Perdóname, TaeHyung. Te amo pero no puedo seguir soportando esto - dijo mirando su anillo en el dedo anular.

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