Historias cortas del ship Sonadow o Shadonic, ninguna tendrá nada que ver con la otra.
Si ustedes lo piden y yo tengo la imaginación suficiente, hago historia sobre el capítulo o si ustedes tienen alguna idea o pedido que me quieran dar yo hago hist...
Hoy tuve un mal día... Y me llamaste para que fuera a tú casa. No he salido en un tiempo de todos modos. Esperaba una sonrisa cuando me vieras.
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«Soy un imbécil.» Pensé, mientras lloraba en mi auto.«Patético.»Yo no soy una persona sentimental, pero está vez todo se había jodido.
Me encontraba lamentándome en mi auto, hasta que mi teléfono empezó a vibrar. Era Sonic, así que sequé mis lágrimas, prendí mi auto y conteste. Aunque ya me imaginaba lo que quería.
-Hola, Shads. ¿Te gustaría venir a mi casa?, me siento solo y siento que tú compañía me ayudaría.-Me dijo con una voz tan sensual, esa voz que tiene me mata. Me prende tanto. Además, si ya todo se había jodido, quería pasar mi última noche con ese maldito y jodidamente sexi erizo azul.
-Está bien, Azul, voy para allá.-Colgué la llamada sin esperar su respuesta y me dirigí hacía su departamento.
En la entrada de está, estaba su sala, está solo tenía una pequeña mesa de vidrio y un sillón amplio para tres personas. Mientras que Sonic estaba vestido con una playera blanca de tirantes y solo un calzoncillo que hacía lucir sus jugosas piernas.
-No tienes que ser romántico conmigo.-Dije sin interés. «Eres lo suficientemente lindo como para coger conmigo.» Pensé, mientras veía su mesa que estaba llena de hierba y cocaína.-Cariño, estás viviendo la vida pero no la estás viviendo bien.-Comente serio.
-Ah, ¿En serio?, ¿Por qué?-Pregunto ingenuo.
-Inhalando cocaína y bebiendo con tus amigos. Vives en la oscuridad, Sonic, no voy a mentir.-Respondí, mientras me quitaba mi saco-No me importa, solo vine a pecar. Mientras no me pases nada, todo está bien.-Lo volteé a ver-¿Y tú novia?
-La termine.-Dijo en seco, ignorando lo que antes le había dicho-Ya no voy a sentir la misma adrenalina, cómo cuando estábamos cogiendo y corríamos el riesgo de que nos cachara. Lástima ¿No?-Dijo tranquilo, mientras inhalaba el polvo blanco que había en su mesa.
-¿Por qué terminaron?, creí que tenían algo serio.-Pregunte con curiosidad.
-¿Serio?-Dió una carcajada-Lo nuestro no era algo serio, o al menos para mí no.-Agarro una cerveza y la destapo-Terminamos porque me descubrió drogándome. Si te soy honesto, yo pensé que tal vez íbamos a coger drogados. Pero no, ella es políticamente correcta y me prohibió drogarme.-Le dió un trago a su cerveza.
