46-. Recuerdo a cada uno de ellos

522 80 10
                                    

Después de unos días de estar en la enfermería, Damian como todo Wayne se negó a seguir en reposo y se auto liberó de los sueros y jeringas en su cuerpo para ir directo a "casa". Pero claro que al llegar las cosas no serían diferentes, Jonathan se aseguró de que su novio descansará como se supone que debió haber hecho en la enfermería.

Damian: "tt" Jon, no necesito descansar

Decía mientras estaba recostado en la cama y Jonathan terminaba de cambiar sus vendas manchadas de sangre por unas limpias y era cobijado por las frazadas térmicas.

Jon: Dami, literalmente estuviste muerto por 3 minutos

Damian: 5, de hecho

Jon: Solo accedí a sacarte del quirófano pero necesitas descansar.

El mayor suspiró al ver que Jon no tenía intenciones de rendirse, hasta se acostó junto a él para asegurarse de qué durmiera junto con Titus recostado en sus pies. Sintió la cálida respiración de Jonathan y las caricias suaves que le daba en su cabello.

Jon: Duerme, Damian. Lo necesitas.

Damian: "tt" No estoy cansado

Fue lo último que dijo antes de caer dormido.

Al despertar no vio a Jonathan a su lado o Titus por ningún lado, por lo que decidió ir a buscarlos, a pesar del dolor y los puntos de su herida. Fue a ver al baño de la habitación pero no encontró a Jonathan.


Pov. Damian:

Damian: ¿Jon? ¿Titus?

Fui a revisar el resto de la casa pero no había señales de Jon o de Titus, incluso lo llamé con el silbido especial que usó cuando estoy en peligro pero no hubo señal de mi fiel guardián. El miedo me empezaba a invadir de pies a cabeza.

Damian: ¡¿Jonathan?! Si esto es una broma, no me está haciendo gracia.

Me quedé paralizado y con un escalofrío en mi columna cuando me encontré con unas huellas color carmín en la puerta del patio trasero. Ahora no solo estaba asustado, estaba horrorizado y desesperado, sin duda esas huellas pertenecían a Titus.

Fui corriendo al patio trasero y empecé a buscarlo.

Damian: ¡TITUS! ¡¿TITUS?! ¡RESPONDE! ¡POR FAVOR!

Las lágrimas ya caían sin parar por mis mejillas, no lo podía perder a él también, era lo único que me quedaba de mi familia.

Escuché un ruido detrás de un arbusto al fondo y cuando sin piedad arranqué las hojas y ramas solo fue para encontrar a Jonathan arrodillado ahí cubierto de sangre con Titus con el cuello roto.

Damian: N-NO. ¡NO!

Me dejé caer de rodillas frente al cadáver de mi querido amigo.

Jon: Llegaste tarde, Damian

Mire a Jon a los ojos y volví a bajar la mirada pero noté algo en el brazo de Jonathan

Damian: ¿Es...eso es...

Jon comenzó a llorar y me dio un fuerte abrazo

Jon: Lo siento, Damian. Lo siento tanto.

Damian: No, no me dejes, te necesito.

Jon tomó mi rostro en sus manos dejando un rastro de sangre en ellas.

Jon: Se acabó la suerte

Poco a poco veía como su rostro iba perdiendo color y sus venas comenzaban a marcarse por todo su cuerpo hasta que sus hermosos ojos azules se apagaban y cambiaban a unos grises moribundos.

Apocalíptico (Apocalipsis zombie) (REESCRIBIENDO)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora