Esa noche (Fanfic VI x Caitlyn) (Jinx & Lux)

El otro lado de la moneda

Pocos días después de la explosión, Jayce se levantó de la cama del hospital, Piltover se había convertido en una ciudad llena de miedo, sus órdenes fueron cerrar la ciudad por completo, tan pronto se recuperará pensaría en que hacer apenas pudo descansar, pero pronto se dio cuenta de que estás heridas iban mucho más allá del dolor físico,

En las noches sufría terrores en donde veía morir a Medarda una y otra vez frente a sus ojos sin poder protegerla, el insomnio le proporcionaba un muy mal humor y comenzó a volverse más violento,

Cada que los vigilantes le informaban sobre maleantes de Zaun haciendo de las suyas para meterse en la ciudad, los obligaba a responder con bajas,

Así poco a poco los habitantes de Zaun y Piltover  comenzaron a ver con terror a Jayce,

Pero "reinar" solo una ciudad era difícil, mucha responsabilidad para una sola persona, así que pensó en volver a crear un consejo, envío cartas a las ciudades y países de quienes habían sido los anteriores cancilleres, pero ningún país o ciudad quiso atreverse a enviar delegados, afirmando que "hasta que la criminal Jinx sea apresada, nos es imposible enviar un ciudadano en representación nuestra, temeriamos por su seguridad, no hay nada que nos garantice que no vuelva a ocurrir una tragedia",

Enojado Jayce quiso detener los envíos Hextech para obligar a las personas, pero se dio cuenta de que se perjudicaría a si mismo,

Por ahora tenía poder económico y una tecnología que en ninguna otra parte del mundo se había visto, no debía perder esa ventaja,

Así que se vio a si mismo como un mesías que debía poner en orden de nuevo a Piltover,

Retorno los fallecidos a sus hogares natales y de Medarda guardo las cenizas en su estudio, para siempre verlas mientras tomaba decisiones difíciles y recordarse a si mismo que no podía ser débil ni por un segundo,

Ambessa Medarda apareció dos semanas después, Jayce advertido de su visita le invito a pasar, sabía que ella no estaba allí precisamente para reclamar los restos de su hija,

-Bienvenida, ¿A que debo agradecer su visita?
+Bueno sería mal visto de mi parte no pedir los restos de Medarda, pero ahora que veo que los mantiene tan cerca de usted siento que no podría separarlos.
-Ella siempre estará en mi corazón, debí haber sido más fuerte, debí haber sido más sabio, con ningún enemigo se puede realmente crear tratos o alianzas.
+En eso está en lo cierto, pero no todo es culpa suya, mi hija tenía un gran corazón, pero era una oveja entre lobos, sabía que tarde o temprano terminaría herida por eso, la envíe aquí pensando que sería más seguro que Noxus, pero tarde en darme cuenta de mi error, esa decisión maleo su carácter.
-Mel era una buena persona.
+Lamentablemente no soy una persona que suela encontrar consuelo en el llanto, sino en la misma acción de tomar venganza, ha pensado usted en eso Jayce, imagino que es algo que no le deja dormir en las noches a juzgar por su rostro
-Yo haré lo que sea, destruiré Zaun por completo de ser necesario hasta encontrar a esa maldita mujer.
+Me alegra saber que Mel, escogió un hombre dispuesto a vengarla, así que le tengo un pequeño trato ya que probablemente nuestras intenciones puedan llegar a un fin común
-Un trato?
+Recuerda el día en que nos conocimos?
En aquellos baños termales, estaban bastante bien para mi gusto,

Le propuse la creación de unas armas a partir del Hextech, usted tiene la tecnología yo tengo la fuerza que puede impulsar esa tecnología.

Le ofrezco un ejército de hombres noxianos dispuestos acabar con Zaun hasta que encuentre a la culpable de estos fatídicos hechos y a cambio usted compartirá esas armas para nuestros propios fines.

Se por boca de personas confiables que se encuentra solo, que necesita apoyo en este momento, comandar una ciudad es tan solitario de la forma en la que lo está haciendo,

Le está dando bastante ventaja a Jinx para escapar... Si es que ya no lo ha hecho.
-Eso no podría ser posible varias personas han dicho haberla visto paseándose por Zaun, regodeandose de las muertes que ha causado.
+Puede que sean solo especulaciones, no puede darse el lujo de confiar ciegamente en estos momentos.

Medarda se levanta de su asiento y se acerca a la ventana,

¿Que ve allí?

-Una ciudad destruida.

+Yo veo potencial, imagine, destruir Zaun, destruirla junto con toda su plaga de drogas y adictos y contruir sobre ella la continuación de un Piltover, lleno de comercio, de extranjeros paseándose asombrados por la magia de la ciudad, hacer de Zaun una ciudad tan orgullosa como la misma Piltover,

-Seria el rey de las cenizas, quien quisiera venir a vivir a un lugar donde se cometió un genocidio?

+Los Noxianos no nos preocupamos mucho por el pasado del lugar, nos esforzamos por hacerlo mucho mejor, como sabe nuestra nación es una meritocracia, nos temen por nuestra fuerza, pero tenemos una sociedad fuertemente conformada por personas capaces, por nuestras calles nunca verá un mendigo,  muchos ebrios probablemente, pero jamás una persona que no sea de valor.

Podríamos hacer traer una pequeña comunidad, así usted estaría siempre protegido por nosotros, nadie e atrevería a amenazar de nuevo a Piltover. Ya son fuertes económicamente, seanlo ahora con un buen ejército.

+Aún si quisiera cerrar un trato con usted, mi compañero de investigación desapareció, y tendría que ajustar todo para crear armas Hextech.

-+Jayce, todo tiene un proceso, lo más importante es dar un primer paso,
Yo entiendo eso - Medarda se acerca al asiento de Jayce, tan imponente como siempre- podemos darnos un momento de 2 meses, yo regresaré a Noxus por asuntos políticos y arreglaré todo para regresar con un ejército completo a su disposición.

-Suena tentador pero..
+Jayce - Ambessa le coloca una mano en el hombro- usted es un hombre fuerte, es joven, pero sé que está tomando las decisiones correctas, no permita que la soledad sea su única aliada...

Es más -baja su mano hacia su pecho- podríamos ayudarnos mutuamente a consolarnos, no le gustaría desahogarse un poco...

El estrés de los días anteriores y la depresión, hace que el solo roce de Ambessa, excite lo suficiente a Jayce como para que su miembro se coloque duro, Ambessa lo nota y sonríe

-Vaya, no esperaba menos de un hombre tan viril

Comienza a rozar su mano sobre el bulto en el pantalón de Jayce, Jayce sonrojado no la mira a los ojos,

- Porfavor, disculpeme, ha malinterpretado
+No se disculpe, sabe un hombre como usted necesita de vez en cuando deshinibirse, debo comentarle que me gustan más pequeños que usted, pero en vista de tan buenas proporciones, podemos darnos una oportunidad, que dice?

Jayce esta sudando frío, su excitación lo tiene al borde, quizá la fuerza de Ambessa, su imponencia es algo que el en este momento añora,

Desabrocha su pantalón y Medarda comienza a acariciarlo....

Esa tarde Jayce comprobó que hacer el amor y tener sexo era algo muy distinto, el sexo era feral, se golpearon como si hubieran querido matarse y lo hicieron hasta cansarse, era más un juego de poder, quien agotaria a quien primero,

Finalmente luego de esa sesión, Jayce se levantó, tomo los restos de Mel y fue hacia el balcón, comenzó a tirarlos al viento,

Se sentía el peor hombre, ahora no solo no había podido protegerla, se había acostado con su madre, quién no se mostraba muy aturdida por el hecho, al fin y al cabo, era una guerrera curtida, las únicas emociones fuertes que gustaba eran las de conquistar imperios.

Pero había una alianza, un trato sellado por sudor, sangre y poder.