Vuelta 21 (Reescrita)

2.5K 214 27
                                    

– Lauren, por favor abre la puerta – pide Lewis después de pedírmelo por cuarta vez, me mantengo en silencio de pie en el balcón – Estas celosa lo sé, pero las cosas no son como tú crees.

¿Quién se cree?

¿Celosa yo?

Ni de cerca.

Voy hasta la puerta y la abro, me lo consigo recostado de la pared mientras tocaba la puerta, sus ojos se conectan con los míos y decido dejarlo pasar.

– No estoy celosa Lewis – aclaro con seriedad mientras lo observo – Pero si estoy furiosa contigo ¿Te parece que esta bien que tu ex viniera para acá a decirme que paso la noche contigo? ¿Te peso tanto la mano como para llamar y decir lo que estaba pasando?

– A ver fui a cenar con los chicos, yo te dije – dice nervioso tratando de explicarse mientras entramos a la habitación para que Sam no nos escuche.

– Claro y mágicamente los chicos se convirtieron en Tamara ¿no? – preguntó irónica.

– Ella ya estaba en Bahréin con su padre, no hace falta que yo te diga quién es él- explica sereno – Te juro que lo que dicen es falso, fue una cena de amigos, jamás le di alas para que hablara de un posible regreso.

– ¿Dónde dormiste? – preguntó y sus ojos se abren con sorpresa – O debería preguntar ¿Dónde durmió Tamara?

– Dormimos en la misma habitación – suelta tan sincero que estoy segura que mi mandíbula acaba de fracturarse debido a mi sorpresa – Pero yo dormí en el sillón y ella en mi habitación.

– ¿Crees que me voy a creer esa mentira? – camino exaltada por la habitación.

Estoy ardiendo de ira.

Dioosssssss

Maldita sea.

– Te aseguro que digo la verdad, su llave no aparecía, no podía simplemente dejarla pasar la noche en la sala del hotel – explica mientras trata de romper la distancia entre nosotros.

– ¡Claro, claro! Se me olvidaba que eres San Lewis Hamilton ¿no? – preguntó colérica.

– No pasó nada Lauren, lo juro – asegura rompiendo más la distancia.

– ¿Por qué debería creerte Lewis? – pregunto y su mirada se conecta con la mía.

No hagas eso.

No me mires así.

Lewis comienza a acercarse y simplemente doy pasos atrás, hasta que mi espalda toca la pared, el moreno rompe la distancia entre nosotros y me acaricia de forma dulce el rostro.

– Te hace falta más que una caricia para que te crea – escupo ácida – ¿Por qué debería creerte? – Lewis respira profundamente y baja la cara separándose de mí.

– Lauren ya te dije que no hice nada malo – asegura de nuevo.

– Lewis no hagas cosas malas y después quieras hacer creer al mundo que eres un santo – me quedo callada viéndolo – Tamara llegó aquí a darme la ropa que le quedó de su noche en Bahréin, traía puesta una camisa tuya ¿Qué me vas a decir? Claro, de seguro se le cayó una copa de vino y tú te ofreciste de forma caballerosa a darle una camisa ¿no? – Lewis se queda callado y no puedo evitar reírme por lo básica que está siendo esta escena.

Safety Car (Trilogia Pit Lane #1) (Lewis Hamilton)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora