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Ichika Hoshino, una estudiante de primer año de Miyamasuzaka Girls Academy, a la cual le gustaba la música, cantar y tocar la guitarra, hacía ya un tiempo que no lo lograba, por alguna razón cuando ponía sus dedos en las cuerdas de la guitarra no podía seguir, se quedaba paralizada y simplemente lo dejaba ahí, quizá era algún tipo de estrés que le dejó lo que sucedió aquella vez...

La chica, algo ya exhausta de estar en su habitación todo el día decidió levantarse a caminar un rato, solo alrededor de su cuarto porque no se sentía con ganas de salir, miró hacia afuera por la ventana.

- está lloviendo... - dijo en un pequeño susurro con algo de pena, la lluvia le traía nostalgia por alguna razón, se sentía un poco triste así que se apoyo en la ventana con las manos en la barbilla.

- todo cambió mucho desde ahí, me gustaría poder hablar con ella una vez más... - dio un suspiro largo y pesado, decidió levantarse a beber algo de agua, si se quedaba en la ventana corría el riesgo de llorar, y no quería hacerlo, menos aún porque eso la hacía sentir sola.

Bajó lentamente las escaleras hasta llegar a la cocina, ahí vio una pequeña bolsa con algo dentro, venia con una nota: "te compré esto, por favor comelo, estos días no comiste demasiado y comienzo a preocuparme"
-mamá

Vaya, que bonito gesto.

Ichika sonrió levemente, apartó la nota a un lado y vio el interior de la bolsa.

Era un pye de manzana.

Ichika suspiro con asombro, esa pequeña tarta le recordaba a una persona, cierta persona con la cual no había hablado desde hace meses.

Ichika suspiro con asombro, esa pequeña tarta le recordaba a una persona, cierta persona con la cual no había hablado desde hace meses

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Holaaa, este solo es el inicio de esta historia, por eso la hize corta, prometo que la siguiente será más larga, perdón!

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