¿Doble personalidad?

Capitulo 1 - Despertar.

Xichen miro al hermoso omega dormido en su cama, no se supone que esto pasara, el no acostumbraba salir con omegas a pesar de ser un alfa, era demasiada complicación, además no le gustaba como olían, su olfato era demasiado sensible así que el siempre prefirió salir con betas, pero ambos entraron en celó en el restaurante, ambos terminaron ocultándose del olor de las feromonas en el baño y para su desgracia no había un baño para omegas así que terminaron besándose guiados por la atracción y las feromonas.

Había sido unas doce horas atrás, se supone que se vería con Mingjue, hace años que no se veían, habían sido amigos desde niños y más que eso en la adolescencia, aunque no llegaron muy lejos ambos eran alfas y ninguno quería ceder, pero se tocaron, mucho, se sentían demasiado atraídos el uno por el otro, después el padre de Mingjue murió y su amigo tenía demasiado trabajo pues tenía que encargarse del buffet de abogados y de su hermanito, Xichen por su parte fue a estudiar los últimos años de la universidad al extranjero así que dejaron de verse.

El comenzó a salir con betas, era más sencillo sin la complicación de las feromonas y después comenzó a ocuparse de la corporación Lan así que apenas si tenía tiempo libre.

Había tenido algunas citas a ciegas por sugerencia de su tío, el tenía 28 años después de todo pero nadie llamaba su atención, su Alfa parecía haber muerto o estar hibernando desde hace un par de años, llegó al restaurante y pidió algo de beber, Mingjue le envió un mensaje disculpándose pues se le hizo tarde con un caso.

Mientras probaba el vino sintió un olor sutil como a cítricos y no fue el único, noto a todos los alfas levantar la nariz, vio a un chico bastante lindo, uno de los meseros que tenía unos 17 años, probablemente una diferenciación tardía pues el olor era demasiado intenso, llamó a un equipo médico beta para que se encargara, era lo estipulado en este tipo de casos y fue al baño a lavar su cara mientras traían su cuenta y entonces lo olió, ese delicioso aroma a vainilla y flores silvestres, como a primavera, levantó la mirada y vio a un omega cubrir su nariz con un pañuelo y esculcar en su mochila buscando algo, era delgado, con cabello largo y negro atado en una coleta y hermosos ojos grises.

-    ¿Necesitas ayuda?

El chico lo miro asustado – no, vete.

Xichen iba a decirle que eso era muy grosero, se disponía a salir, pero su cuerpo no se movió, su Alfa no le permitió irse, sintió sus colmillos descender, hace años que no lo hacían, él omega le gruñó al verlo, eso fue demasiado, se acercó con paso lento, levantó su mentón y lo beso.

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Weiying abrió los ojos, su cuerpo dolía, vio al Alfa mirarlo con preocupación y culpa, así que le frunció el ceño, en definitiva era su culpa, si tuviera un mejor control de su Alfa esto no habría pasado, aunque quizás también tuvo que ver con el hecho de que el olvidó su supresor, que su parche tenía casi 12 horas en su cuello así que ya no era tan efectivo y que ese maldito restaurante no tenía un baño para omegas, todos los lugares públicos deberían tener uno.

Se supone que vería a un posible inversor, bueno Jiang Cheng lo haría, su hermano que se quedó atascado en el tráfico o eso le dijo, de seguro fue a ver a Wen Qing y por eso se le hizo tarde y el tomó su lugar, pero nadie había llegado, luego ese chico tuvo su diferenciación o su celó, quien sabe, pero el olor era demasiado intenso, se escondió en el baño y este Alfa entró, este maldito alfa sexy como un demonio, alto y que olía malditamente delicioso; intentó alejarlo y terminó gruñendo y el sonrió al escucharlo y lo beso y el maldita sea correspondió el beso, se abrazó a su cuello y comenzaron a besarse como si quisieran devorarse el uno al otro.

El no solía perder el control así, era verdad que quería un Alfa sexy con quien pasar su vida pero conocerlo en el baño de un restaurante no estaba entre sus fantasías, además este Alfa no quería una relación, se lo dijo cuando estaban en su auto, en el que se supone que ellos se pondrían los supresores, lo dejaría morderlo un poco para bajar el calor de ambos y se iría, pero el supresor no funcionó o quizás lo hizo pero a ellos no les importo, el punto es que terminó perdiendo su virginidad con un Alfa desconocido, teniendo doce horas de sexo increíble que lo dejaron completamente adolorido y ahora ambos se miraban sin saber que hacer o decir.