Después de separarse durante 3 años, vuelven a rencontrarse en el mundial.
Pero algo cambio, al parecer las diferencias entre estos se hisieron más notables, ¿Podrán volver a estar junto de nuevo?
Aquí ninguno de los personajes tiene esposa ni hijos.
—Vale vale, no entiendo porque estás tan emocionado por llevarme.
A Ochoa le parecía muy linda la actitud de Messi era demaciado tierna pero aún no encontraba razón por su emoción.
—Es obio tonto, porque me gusta pasar el mayor tiempo contigo.
El argentino le dedico una sonrisa a Ochoa el cuál se sonrojo y por primera vez no peleo por conducir.
—¿Podemos ir a un lugar antes?
—Ammm...no lose Messi, esque sabes que el tata se va a enojar.
—Esta bien
Vio la cara deprimida de Lionel pero tenía que entrenar mañana sabía que no podía salir con el ese mismo día pero lo entristecía ver a Messi así.
—¿Podemos ir mañana?—menciono el chino mientras que Lionel seguía manejando mirandolo de reojo—esque la verdad tengo que entrenar pero me encantaría salir contigo, ¿Puedes mañana?
—Si puedo, ¿a dónde vamos?—una sonrisa se le formó en su rostro—
—Me encanta esa sonrisa que tienes, me vuelve loco—Ochoa otra vez hablo sin pensarlo ya parecía una costumbre que tenía, miro al argentino que estaba completamente rojo como un jitomate— respondiendo a tu pregunta vamos a cenar.
—Si-...—no podía decir palabra alguna seguía pensando en las palabras antes mencionadas, ya no dejaría de sonreír nunca—
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
——————————
—¡¿Dónde te metiste Ochoa?!—apenas había llegado y ya tenía al tata gritándole enfrente—
—Sali con alguien.
—¡Te dije que ningun integrante de la selección mexicana tenía permitido salir y eso te incluye a ti!
No quería pelear con el tata en ese momento es por eso que se retiró de la sala dirijiendose a su cuarto mientras que detrás de él se escuchaba al tata gritar furioso.
—Porque no obedeces Ochoa—Lozano iba detrás de él mientras chocaba su palma con su cara— Nos regaño a todo el equipo por tu culpa y ya sabes como son, no creo que lo dejen pasar fácil.
—No me importa que se jodan ellos y el tata.
Lozano lo miro con una cara de inconformidad pero no podía decir mucho porque al fin y al cabo salió por una buena razón por Messi.
—¿Y como te fue con el?, espero que haya valido la pena los gritos del tata.
—Creme que si valió por completo la pena, creo...bueno se podría decir que el y yo-...
—¡¿Que le y tú qué?! Habla rápido me estresas.
—Estamos intentando algo.
Hirving se veía emocionado pero a la vez frustrado y triste porque de repente le mostraba esa cara a Ochoa lo estaba preocupando.
