Porque las estrellas no dejan de brillar |• KV

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¡Holi! :3

Lo que escribiré me da pena )):

Se que sonará extraño ya que tenemos poco tiempo hablando no te conozco muy a fondo, quizá ni siquiera lo suficiente pero me gustaría hacerlo, para que lo que siento tome más fortaleza y figura, tengo miedo hace mucho que no me sentía así... ¿Tu también lo sientes?, No lo creo, ¿Es repentino?, Quizá... Pero... Decirte que me gustas suena apresurado pero eso es lo que siento, no te obligare a sentir lo mismo, solo quería decírtelo, aunque esto no se pueda, quiero conocerte más, ¿Me dejarás hacerlo?, Aunque sea déjame seguir siendo tu amigo.

Te quiero me despido chao. <3

Hoseok sonrió enternecido al ver como el menor arrojo el celular al otro sillón en cuanto envío la nota, algo quizá bastante sencillo pero le agradaba la valentía que tenía su mejor amigo, pese a ser que se llevaban por algunos años de diferencia siempre apoyaría en todo al menor.

—El romanticismo murió hoy, joder, que simple quedo—Mina se quejó leyendo la nota recién enviada antes de que pudiera decir algo para el creador de esa para nada detallista nota se percató que este ya estaba dormitando cual bebé sobre el suelo.

El alba siguiente Jungkook despertó con una horrenda jaqueca se tocó la sien y repaso su lengua por sus labios sintiendo la sequedad de estos, sus amigos estaban esparcidos por la recámara y él sobre la cama de Tzuyu acompañado de Jimin y Hoseok, se levantó siendo cuidadoso de no pisar a nadie y fue al baño para hacer sus necesidades, después de eso fue a la cocina para beber un poco de agua, frunció el ceño tras escuchar las notificaciones de su móvil, y grande fue su sorpresa al descubrir la nota que envío algunas horas atrás.

Nunca sufría la muy conocida resaca, todas las veces que había bebido nunca pasó por ello, sin embargo se sintió como si estuviera sufriendo, su estómago revuelto y se acercó al fregadero a vomitar, sería la última vez que bebería, había cometido una grandísima estupidez, y su amigo Huening Kai no paraba de enviarle mil mensajes explicándole que había actuado de forma inconsciente y podía usar su alcoholismo como excusa.

Sus manos temblaron su chat seguía intacto, Taehyung no había dado señales de nada aún, estaba en línea, parecía que sus mensajes estaban siendo ignorados, acomodó desanimado su cabello y resoplo, lo mejor sería bloquear el número y alejarse, aunque doliera y quemará si fue ignorado de esa manera era obvio que no sería correspondido; secó las amargas gotas de agua que deslizan por sus mofletes e ignoro el dolor punzante y creciente en su corazón, fue rechazado.

Con sus escasas fuerzas se metió a ducharse, una vez bien acicalado se echó sobre la cama de su amiga, Tzuyu a diferencia de los demás vivía sola y gracias a su grandiosa amistad cada uno tenía una habitación en su hogar, por eso es que se tomaban ciertas atribuciones, nadie supo que tal le fue con la nota que escribió en la madrugada hasta que un grito agudo los hizo correr hasta la habitación del castaño.

—¿Qué sucede?—hablaron todos al unísono viendo a un castaño alegre, eufórico y con las mejillas rojizas.

—También le gustó a Taehyung.

—¡Lo sabía!, ¡Eran bastante obvios, estoy alegre por ti!—Jimin se lanzo a la King zice para abrazar a su mejor amigo, todos se acercaron felicitando al de ojos expresivos, ahora lo más escalofriante estaba por venir, faltaba descubrir como se desarrollaría está nueva historia en su vida.

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Noviembre 23

—Ya, okay, no me creo que ya sean dos meses desde que me animé a hablarte es decir, no pensé que fuera a pasar tanto tiempo hablando contigo—Jungkook rio extendiendo el sándwich vegetariano tal y como el rubito le confesó que era de su agrado, ya que no solía comer jamón, siendo así que el sándwich tradicional no era de su gusto.