capitulo 2

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En lo más profundo de un laboratorio una mujer miraba dos fetos incubándose.

Su mirada era enredada y dolorosa.

Lentamente se acercó al feto más pequeño y lo toco ligeramente.

-Este ADN es raro y precioso, se supone que por ello debo darte como nutriente a tu hermano, me ordenaron que te matara para asegurar su éxito, su victoria.

La mujer apoyo su cabeza en la incubadora.

-Pero simplemente no puedo, por alguna razón me duele en el corazón. Es que es acaso porque a diferencia del otro de ti me encargue únicamente yo y nadie más te toco? Oh es por otra razón? No lo sé, solo sé que quiero dejarte vivir, aunque vaya en contra de mi misión.

-Dime pequeñín crees que podremos escapar a la ira de los Dioses?

Y cuando su decisión fue tomada de salvar a ese feto un dolor de cabeza empezó a invadirla recuerdos volando uno tras otro.

La mujer en algún momento había terminado de rodillas al piso y  miro con reverencia al feto.

-Entonces es por ello de mi cariño, eras mi detonante, mi Agnar.

Ella ahora se veía diferente, más fuerte, confiada, incluso en su estado excitado y conmovido era una mujer lista para la batalla en cualquier momento, una guerrera y líder.

En solo unos segundo pasó de una científica cansada a lo que algunos llamarían una generala.

Su aire, su porte, su aura eran la mayor causa, era la misma cara pero solo por esas cosas parecía diferente.

-Gracias pequeño feto por devolverme...

En eso se escuchan pasos saltarines y un viejito alegre entra al cuarto.

-Bru..bru..bru-chan

Dijo feliz mientras la mujer hacia cara de asco y repulsión.

-Aléjate de mi viejo verde.

El anciano agrando aún más su sonrisa de ser posible y empezó a silbar mientras se acercaba a ella y al feto.

-Ya sabía que esa explosión de energía se me hacía familiar, entonces sí que regresaste Brunhilde.

La mujer lo miro de reojo.

-Y veo que  tú también lo recuerdas eh Zeus? Aunque viendo la dirección de la investigación que se adoptó los últimos años no me extraña. Dime viejo que encontraste ahí arriba?

La mujer no mostraba ni una pisca del antiguo respeto que antes se dignaba a usar, solo se revelaba con sus colores más puros.

Total en estos momentos, los dioses ya no eran tales.

Eran humanos.

No, más bien semi Dioses...así como ella.

El viejo se tiro a reír y alzo la mirada al feto mientras su mente vagaba al pasado.

-Oh Brunhilde, cuanto se nota que Khaos está más que dispuesto a entretenerse a nuestra costa. Este juego pinta para ser largo, largo y divertido. Y todo empezara con este pequeñín...Adam.

La mujer volteo a verlo horrorizada

-Pero él....es decir pensé. ...pensé que ese Adam era nuestro Adam.

El ex Dios rio con ganas.

-Oh lo era y no, no completo ese era mi incentivo Brunhilde

Zeus le devolvió la mirada.

-Un consejo Brunhilde si quieres que sobreviva, busca a su valkyria. Despiértala eh introduce el feto para que ella lo lleve el resto del tiempo, solo cumplirá dos meses, no te será tan difícil, oh e inyéctale esto.

RagnarokDonde viven las historias. Descúbrelo ahora