Capítulo 32: Arreglando los corazones

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No soy dueño de nada en esta historia.

Anthea Schaeffer se despierta cuando los rayos del sol atraviesan las persianas y le dan en la cara. Abre los ojos y se inclina hacia arriba sin reconocer nada en la habitación. Gira la cabeza para ver a su hija durmiendo tranquilamente cuando todo lo que pasó el día anterior volvió a ella. Le sonríe a su hija y la mira fijamente durante unos segundos antes de levantarse de la cama. Se pone la bata y sale de la habitación silenciosamente cerrando la puerta detrás de ella. Camina por el pasillo hacia la sala de estar donde Janet Van Dyke estaba tomando una taza de café y leyendo el periódico de la mañana en la mesa de la cocina.

"Honestamente, pensé que nadie lee el periódico". Anthea habla mientras camina hacia la cocina.

Jan levanta la vista del papel y sonríe: "Sí, normalmente no lo hago, pero Hank tiene mi tableta para algunos apuntes de ciencias que necesitaba revisar". Se levanta de su asiento en la mesa de la cocina dejando el periódico y la taza de café. "¿Quieres algo de tomar?"

"Solo un poco de agua". Anthea le dice antes de sentarse en la silla al otro lado de la mesa de café. "Estoy un poco sorprendido de que Aelita tenga algunos amigos mayores".

Jan se ríe levemente mientras toma un vaso del gabinete. "En realidad, apenas nos hemos juntado como dos niñas. De hecho, es la mejor amiga de mi prima, y ​​también tiene otra amiga que vive aquí conmigo". Jan explica mientras deja el vaso en el mostrador y abre la nevera.

Anthea estaba un poco sorprendida por la explicación. "Vaya, estoy conociendo a más conocidos de mi hija que a sus amigos".

Jan agarra la jarra de agua filtrada y vierte el agua en el vaso. Jan se encoge de hombros en respuesta. "No pienses demasiado en eso. Las cosas estaban locas y agitadas ayer, especialmente después de que Aelita perdiera a su novio antes de conocerte". Jan explica que no se dio cuenta de que cometió un error. Jan vuelve a poner la jarra en el refrigerador y se da la vuelta para mirar a Anthea y se detiene cuando ve la cara de sorpresa de Anthea. "Oh no, no debí haber dicho eso". Jan deja el vaso de agua sobre la mesa y se sienta en la silla frente a Anthea. '¿Cómo puedo solucionar esto?' Piensa tratando de pensar en una manera de evitar explicar los eventos que sucedieron ayer.

"Mi hija tenía novio". Anthea murmura antes de mirar hacia la mesa en estado de shock. "¿Lo que le sucedió?"

Jan suspira y aleja su cuerpo de Anthea. "Dije demasiado, pero si realmente quieres saber, debes preguntarle a Aelita. Ella debería ser la que te explique todo, no yo".

Anthea suspira: "Tienes razón". Vuelve a mirar a Jan y se da cuenta de lo incómoda que se ve Jan. "Tengo mucho para ponerme al día con mi hija, pero ella nunca mencionó nada sobre perder a su novio".

"Debería haberlo imaginado". Jan murmura que no le gusta el hecho de que reveló algo que no debería haber revelado. "Los eventos que condujeron a que Aelita te encontrara no fueron fáciles para ninguno de nosotros".

Anthea suspira y agarra el vaso de agua. Baja la vista hacia el cristal y decide cambiar de tema. "¿Quién es tu primo del que mi hija es amiga?"

Jan sonríe agradeciendo que Anthea cambie de tema. "Su nombre es Danny Fenton. Él y Aelita se conocieron cuando Hydra atacó su antigua escuela en Francia. Él la salvó a ella y a sus amigos de Hydra, y debido a algunas circunstancias, su hija decidió unirse al Instituto Xavier para Jóvenes Dotados".

Anthea parpadea un par de veces. "¿Acabas de decir Instituto Xavier?" Ella pregunta con cuidado.

Jan asiente y toma su pequeña taza de café. "Sí, ambos van allí".

Anthea se recuesta en su silla y suspira, "Así que ella vive en un lugar para gente especial..." Anthea niega con la cabeza malinterpretando para qué era el lugar. "¿Qué hizo ella para entrar en ese lugar?"

¡Evolución fantasma! -HIATUS-Donde viven las historias. Descúbrelo ahora