Mi subordinada
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Quien podría creer que a los 35 años se le asignaría entrenar a una muchacha de 16 años, a decir verdad ni el supo de donde saco tanta paciencia para entrenarla, no lo malinterpreten la chica no era problemática simplemente era muy introvertida por lo que para el se le era muy difícil
hablar contigo.Makima le había asignado un nuevo "Perro" para entrenar, le dijo que vio un gran potencial en ti por lo cual debían aprovecharlo, cuando te conoció mejor algo dentro de su fría personalidad cambio, algo que nunca había sentido con otros subordinados estaba sintiéndolo contigo.
Pena, eso era lo que sentía al ver tu triste mirada, habías crecido sin padres y vivías en las calles participando en peleas callejeras, un día un demonio intento atacar a tu mascota, simplemente lo hiciste pagar por intentar tragarse a tu gato.
Desde la primera vez que te vio pelear con el observo que tenias, determinación y fuerza; No te rendías a pesar que te pateaba una y otra y otra vez, a pesar de los fuertes golpes que te brindaba Kishibe no te rendías, solo tenias un objetivo y era darle aunque sea un solo golpe.
Tan solo con brindarle un maldito golpe serias feliz.
Y lo lograste pero... a que costo?, bueno fue al costo de casi tener parálisis facial y "muchas heridas de batalla".
Cada día libre que tenias lo aprovechabas para entrenar y divertirte un poco con tu mascota Grisha un pequeño gato blanco ojos verdes con una personalidad maravillosa.
Luego de esos duros entrenamientos pasaron años haciéndose compañía mutua, Akari había mejorado demasiado, fue así que Kishibe se dio cuenta que necesitaba hacerte una ultima prueba.
El ya sabia que si aprobabas corrías el riesgo de morir como Devil hunter, sin embargo eso no fue un problema para ti, aprobaste su prueba mostrando lo mejor de ti, nunca se había sentido tan asombrado de tu esfuerzo.
Finalmente el día de decirle a Makima que ya estabas lista llego, su primer pensamiento fue decirle que no estabas lista sin embargo se dio cuenta que tu esfuerzo fue para cumplir tu meta de proteger a las personas de los demonios por lo que opto por decirle la verdad a Makima.
- Entonces dime Kishibe, que tal va Akari?...ella ya esta preparada?
-.....
- Recuerda que su trabajo de Devil hunter depende de ti Kishibe-
- Ella....ella esta más que lista-
-Bien entonces creo que a partir de la próxima semana se le asignaran misione- la pelirroja no pudo terminar de hablar puesto que el de la cicatriz la interrumpió
- Recuerda Makima.. yo se que puedes caerle muy bien a los altos mandos, pero nunca a mi, si intentas hacerle algo o usarla como tu mascota...no te lo perdonare.
- De que hablas, yo solo busco lo mejor para los Devil hunters incluyendo a Akari.
- Por favor, ambos sabemos que eres una mentirosa, ni tu te crees ese maldito cuento tuyo-espeto de manera brusca- en fin Makima.. estas advertida.