UN MISTERIO DE UN NOMBRE

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Narración.
Minos, Aiacos y Radamanthys se marcharon a sus puestos dieron órdenes a cada una de las divisiones, espectros fueron a sus prisiones y otros a montar guardia en el castillo del señor Hades. Entre susurros y murmullos se escuchó de las voces de espectros que ahora era la señorita Pandora quien dominaba y tomaba el mando por órdenes de los consejeros de Hades llegando a los oídos de los jueces.

Minos: ¿qué? Aiacos, Radamanthys -llamo- es verdad ¿que la señorita Pandora ahora controla al inframundo?.

Aiacos: sí, así es Minos ahora ella es quién está al mando-contesto mientras se sentaba cruzando los pies-.

Minos: ¿ah? ¿Y el Señor Hades? -cuestiono-.

Radamanthys: La Señorita Pandora dijo que regresaría nuestro señor después de mil días o más tiempo, así que no sabemos con exactitud cuando volverá, pero -agacho la mirada por un momento- debe de ser una pesada carga para ella que lleva en sus hombros toda esa responsabilidad.

Aiacos: ¿y tú Minos? -volteo a ver a su compañero desconcertándolo- ¿qué paso allá mientras estabas con la princesa Himari?.

Minos: hm...hmg... recabamos información cuánta pudimos y al parecer en la batalla que tuvo con Pegaso la sangre del señor Hades le fue brindada una gota para despertar a una fuerza maligna.

Aiacos: ¿qué una fuerza maligna? Pero ¿quién?.

Radamanthys: -miraba atento a las palabras de Minos-.

Minos: todo parece indicar que fue Eris, pero solamente encontramos la manzana de la discordia y se la llevó consigo ella misma quizás para despertar a Eris o alguien más.

Radamanthys: quizás a Lucifer.

Aiacos: eso piensas Radamanthys -el inglés asintió- ¿por qué?.

Radamanthys: en unos de los pergaminos que encontré hace muchos años...decía que en una de las tantas Guerras Santas Hades fue encerrado por Athena usando la técnica de Misopethamenos encadenando y sellando al Señor Hades...pero... antes de ser sellado dejo derramar su sangre y traspaso el éter llegando a Lucifer y brindándole un cuerpo.

Minos: ¿¡qué!? Radamanthys crees que la manzana sea para... -el juez intervino-.

Radamanthys: no estoy seguro Minos, pero me hace pensar en esa historia y solo puede contar como una probabilidad entre una en un millón.

Aiacos: hmg... si es así...entonces ¿por qué no investigamos acerca de las antiguas Guerras Santas? Quizás obtendremos más información y podamos adelantarnos a los hechos.

Minos: ¿crees que sirva? -pregunto-.

Radamanthys: tiene que, es la manera de ayudar y estar listos.

Minos: me parece bien -los tres se levantaron- por el momento vayamos al castillo.

Aiacos: andando entonces -los tres jueces abrieron sus alas se marcharon del lugar-.

Narra Himari.
Ella nos estaba esperando su mirada era de seguridad absoluta no dudaba de nada, todos los espectros vestían armaduras Sapuris y los jueces estaban ahí, dio órdenes y todos las acataron, aunque... sus palabras fueron de una gobernante, me gustaría tener esa misma seguridad y confianza. Llegamos al castillo ella no dijo nada solo la vi sentarse y pedir algo de tomar mientras yo me sentaba enfrente de ella.

Pandora: estoy cansada...siento mi cuerpo débil aún.

Himari: debió de ser difícil traer de vuelta todas las Sapuris ¿no es así?.

Pandora: sí, pero veo que valió la pena puesto que has regresado y estas aquí al fin -una dama de ella trajo dos tazas de té de canela con flores de Jamaica- toma debes de venir agotada.

Himari: tía yo... -tomo la taza y la miro- no poder soportar estar en la misma situación...no todo el tiempo.

Pandora: te refieres a Minos, en tus ojos se ven hija mía-dijo tranquila- lo note.

Himari: tenerlo cercas de mí, su presencia, su voz, su mirada tía me hace temblar...no creo poder ocultar este sentimiento por mucho tiempo -bebió de la taza-.

Pandora: hmg... me encantaría decirte algo reconfortante pero desgraciadamente no es así... aunque a quién más le desconcierta es a Minos.

Himari: hmg... sí, pero...Minos él...hmg es imposible... yo y Minos...lo nuestro...no puede ser una realidad.

Pandora: sé que te duele mucho y más porqué sabes que ambos se corresponden mutuamente, pero sus destinos los separa, así como el mío, pero me gustaría verte feliz deseo tu felicidad -ella solo desvió su mirada triste-.

Himari: pero...

Pandora: hmg Minos es un buen hombre y tú una buena chica y sabes que hay una conversación pendiente entre ustedes dos, deben de hablar.

Himari: hmg...no tengo el valor -volteo a verla- pero y Radamanthys ¿qué paso entre ustedes dos?

Pandora: lo sé, hmg...pues... no sé nos correspondemos ambos y nos acercamos, pero...no sé ni lo que somos no sé si somos algo o solo soy su Señora.

Himari: note como te miro yo diría que en algún momento te pediría ser su novia -ese comentario provoco un sonrojo en la alemana-.

Pandora: ¡hmg! -sus mejillas estaban en un tono carmesil al imaginar tal cosa, pero fue interrumpida por unos pasos- ¿ah?.

Himari: hmg -miro a Kagaho llegar directamente con Pandora- ¿quién eres?.

Kagaho: soy Kagaho antiguo espectro de la Guerra Santa y la sombra de la Señorita Pandora su fiel sirviente.

Pandora: ¿qué sucede Kagaho? -miro al espectro arrodillándose-.

Kagaho: mi Señora, me pidió el señor Hypnos que la llevara al templo de la montaña, él la está esperando ahí.

Pandora: ¿¡ah!? -se asombró al escuchar las palabras del espectro su mirada fue hacia los ventanales- el Señor Hypnos....

Continuara....

PANDORA Y RADAMANTHISDonde viven las historias. Descúbrelo ahora