Shisui Uchiha

182 7 0
                                    

Pedido por: CharlotteLadedisney1

Creo que de no haber sido por ti, mi querida ottoto, nunca lo hubiera conocido

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Creo que de no haber sido por ti, mi querida ottoto, nunca lo hubiera conocido. El chico genio, prodigio del clan Uchiha.

[•••]

—¡Onēsan! ¡Onēsan!

Mi hermana me gritaba desde la puerta de la academia, estaba a lado de otro niño de cabellos negros. Si no me equivoco el era el hijo de Fugaku-Sama. Cuando estaba a su lado saltó a mis brazos mientras yo la apretaba contra mi.

— ¿Cómo te ha ido hoy en la academia?

— Ha estado súper genial! Itachi es muy bueno en todo, y me he emocionado de tan solo verlo!

Dirijo mi mirada al pequeño, este estaba con la vista a lado y con un pequeño sonrojo, me provocó una gran ternura por lo que le sonreí y le revolví sus largos cabellos.

—A que eres todo un escándalo he

Dije provocando que se pusiera como tomate.

—B-bueno Izumi lo e-xagera

Su comentario me produjo una carcajada y vi a mi hermana mirando a Itachi, cosa que le mande una mirada acusadora como adivinando su pequeño interés en el menor. Así que se me ocurrió un plan para que estuvieran más tiempo juntos.

—Iba a llevarte a comer ottoto, así que Itachi gustas acompañarnos a comer, dangos?

{el pequeño se iba a negar pero en cuanto la pelinegra mayor mencionó la palabra dangos, fue difícil decir que no}

— ¡Perfecto, andando!

Tome de la mano a los dos pequeños y me fui a dirección al puesto. Llegando, cada uno pidió una orden y se sentaron en el muelle mirando al pequeño lago. O bueno al menos los menores. Yo los veía de lejos con brillitos en mis ojos. Al parecer mi ottoto tiene mejor experiencia en el amor que yo misma.

Suspire.

—Que problemático es eso del amor...-susurré.

—Bueno eso depende de la perspectiva de cada quien.

—¡ah!

Solté un grito por el repentino comentario, sintiendo un escalofrío en mi oído. Era algo que sin duda alguna no me esperaba y menos que haya sido en mi oído y a espaldas de mi.

— ¡Perdona, no quise asustarte de esa manera!

Mire al chico que parecía como de mi edad, pude distinguir que era miembro del clan Uchiha por su playera marcada con el símbolo del clan. Y sus distintivas características, cabello oscuro, ojos oscuros, piel blanca o morena claro, alto y fornido.

Simplemente no pude quitar mi mirada de él, era simplemente atractivo. Pero habrá notado mi mirada, que el tuvo que voltear sus ojos a dirección donde estaba mi hermana y Itachi.

—Perdona mi intervención, andaba buscando a mi amigo itachi pero lo vi con aquella niña así que cuando me iba a ir te noté viéndolos de igual manera, así que quise venir a charlar.

—Oh ya veo, bueno yo puedo decirles que nos tenemos que ir y ya tú podrías irte con Itachi...

—Estaría estupendo, eh...¿cuál es tu nombre?

—Aoi Uchiha, y el tuyo?

El solo me dio una hermosa sonrisa y extendió su mano para que yo se la diera así que se la di, viendo nuestras manos y después vi sus ojos, y el los míos.

—Shisui Uchiha para servirte, princesa

Su comentario provocó distintas emociones en mi interior y su guiño me desconcentro, solo podía sentir mis mejillas arder, así que aparte mis manos de golpe y grite el nombre de mi hermana. Ambos niños se dirigieron a nuestra dirección con una sonrisa mi hermana me abrazo y Itachi se dirigió a Shisui con un semblante confundido.

—Adiós Itachi, espero que pronto nos volvamos a ver.

Le dije al pequeño revolviéndole de nuevo sus cabellos, luego dirigí mi mirada al mayor y solo pude sonreírle apenada y este contesto con un asentimiento y con su hermosa sonrisa. Me puse nerviosa así que solo agarre la mano de mi ottoto y la jale para irnos a la casa sin dejar que se pudiera despedir de su pequeño crush.

[•••]

—Oye Aoi, ¿puedo hacerte una pregunta?

—Ya la has dicho Shisui

Solté una risa al ver como este hacía un pequeño berrinche. Si bien Shisui y yo después de habernos conocido, comenzamos a toparnos todo el tiempo, ya sea por la aldea o incluso en misiones. Y conforme el tiempo ambos hemos entablado una linda relación.

— ¿Te gusta algún chico? -me sorprendí ante su tono serio. No era la primera vez que le veía así pero seguía sorprendiéndome porque su personalidad era todo lo contrario.

— Yo esto, no, bueno si, pero no. -me vio confundido, hasta yo misma me confundí. Así que solo solté un suspiro para intentar relajarme.

— Bueno si hay alguien que me gusta, pero creo que nomas me ve como una amiga...-dije notando su reacción de desconcierto, se veía más serio de lo normal teniendo su mirada fija en el suelo cómo debatiéndose en decirme algo. Pasaron largos segundos en silencio hasta que el de imprevisto alzó su mirada y me vio intensamente.

— ¿Puedo saber quien es? -me miro ansioso esperando mi respuesta. Sin embargo yo estaba pensando en decirle que era el, pero luego sabía que me diría que no me veía de esa forma y terminaríamos terminando nuestra amistad solo por mi error de haberle dicho. Le iba a contestar ya, diciendo el nombre de un amigo de la academia, pero el chico se me adelantó.

— Sabes realmente no quiero saberlo. -gruñó levemente. — Seré franco , Aoi me gustas, me gustas no como una amiga o alguien cercano a mi. Me gustas de la manera romántica y llevaba tiempo queriéndotelo decir pero simplemente creí que ahora tú podrías querer a alguien y me agüite pensando que ya no querrías pasar tiempo conmigo. Y ahora que se que te gusta alguien, quise decírtelo. No tienes que corresponderme ni si quiera responderme, pero sólo quería que lo supieras. - su mirada estaba en el suelo, esta vez deprimido.

Lo veía. Estaba sorprendida de todo, no podía creer que esto estaba pasando y si esto era un sueño esperaba jamás despertar. Lo vi con ternura y tome sus mejillas entre mis manos, obligándolo a verme. Pero le di un beso en el cachete, provocando una exaltación en el mayor y teniendo como resultado su sonrojo total, lo que me causó ternura que me hizo soltar una risa.

— Shisui, también me gustas...

||𝗡𝗔𝗥𝗨𝗧𝗢 𝗢𝗡𝗘𝗦𝗛𝗢𝗧'𝗦|| PEDIDOS ABIERTOSDonde viven las historias. Descúbrelo ahora