°•Decisiones•°.

~Capítulo 3~

Escribiendo un problema.

Pensar que todo iba a cambiar fue algo estúpido de mi parte. Creer que algún día olvidaría todo fue egoísta. Ya me doy cuenta de que los errores se quedan y las buenas obras al paso del tiempo desaparecen.

¿Cómo hago?

Sigo sintiendome culpable, sigo viviendo la misma pesadilla de siempre. Es que acaso voy a vivir toda mi vida lamentadome por lo ocurrido en el pasado. ¿Por qué no puedo vivir al menos con un poco mas de felicidad? ¿Por qué no puedo llorar menos?

Sigo buscando las respuestas de esas preguntas, pero ni siquiera he logrado conseguir ni una pista. Todo cada vez empeora, me carcome por dentro, el saber que pude evitar su muerte, al menos la de él.  Pero como siempre, núnca hago nada, solo dejo que ocurran las cosas. Tal vez ese es mi mayor defecto.

18 de septiembre. Ya casi se acaba el verano, para asi darle paso al otoño. Se que suena raro, pero me gusta ver las hojas caer. Es como si calleran con el unico sentido de alguna vez volver a descender. Tienen la confianza de  que volveran a ser verdes, de que volveran a ser algo, algo muy pequeño, pero a la vez gigantesco.
Algo muy hermoso y a la vez dificil de persibir.

La fresca brisa abraza mis mejillas sonrojandolas levemente. Se puede decir que estoy a una altura bastante considerable. Simplemente es el único sitio en el que puedo estar sola, sin nadie molestando. No tiene nombre en especifico, se puede decir que es un lugar poco significativo para muchos, pero para mi, es el único sitio que concuerda con mis espectativas.

Un edificio escombroso y abandonado, este es mi sitio. El mas importante. El que me ayuda a respirar libremente, el que siempre ha estado ahí para mi. Un sucio edificio viejo. Pero este lugar tiene su historia, una de la cual me siento culpable de su final.

•••

—Este es mi lugar favorito—dice el trigueño observando las estrellas.

—Pues entonces el mío tambien—sonrio bobamente.

—Este es el lugar de ambos, nuestro secreto—me mira directo a los ojos.

•••

Nuestro secreto...

Sigue siendo nuestro secreto.

Me arrecuesto sobre el pedriegoso suelo de aquella terraza y abro un paquete de patatas.

¿Como es posible poder guardar tantos recuerdos? Siento que cada día me hace aun mas falta volver a revivirlos, volver a empezar de cero, como antes. Viendo nubes rosas con cielos azules, mirando noches brillosas llenas de estrellas fugaces. Pintando un papel en blanco con distintos colores. Extraño ese mundo. Pero mas los extraño a ellos, que fueron los que me conformaron ese sueño.

El cielo esta cubierto de nubes esponjosas y el sol brilla en lo mas alto. Es un dia magnifico.  El aroma a paz es increiblemente agradable, si fuera por mi nunca me iria de aqui.

Es perfecto.

Una llamada entrante me sorprende, es mi tía Clara.

—¿Si?—respondo a la llamada. Ok, ya voy en camino—cuelgo.

Me levanto sacudiendo la saya del uniforme y agarro mi mochila. Antes de irme le doy un último vistaso al lugar. Suelto un largo suspiro de alivio y sonrío levemente.

Volveré.

•••

—¡Me puedes explicar que es esto!—dice con tono furioso colocando un folleto sobre la mesa.