⿻ After Party

Swords (pag.1)

— ¿Al menos pensaste en mi cuando le bajaste los putos pantalones a Jeongin? — Exclamó el de cabello negro. Sus ojos se encontraban hinchados, pues había estado llorando casi toda la mañana tras descubrir a su mejor amigo acostándose con el que se suponía que era su pareja.

El rubio apretó los puños con furia y se sentó sobre la cama en donde se encontraba el menor de cabello rojo abrazando su cuerpo con un poco de miedo, y claro, también estaba derramando lágrimas.

— Seungmin, te juro que no lo hice para hacerte sentir mal, eres mi mejor amigo, eres alguien importante para mi, no te quiero perder por una estupidez— el pelirrojo se levantó de la cama con las sábanas enrolladas en su cuerpo para después acercarse a su mejor amigo, Seungmin.

— ¿Qué coño te pasa, Jeongin?, te parece una estupidez?, ¡Te acabas de meter con mi puto novio!, ¡¿cómo se supone que me tomé esto como una maldita broma?!, ¿si soy tan importante para ti, entonces por qué hiciste esto?, ¿por qué me destrozas de esta forma...?— Rompió en llanto ante aquellas palabras, Seungmin  jamás pensaría que su mejor amigo, el cuál conocía desde la infancia, ahora mismo se encontraría acostándose con su novio.

Dió un empujón al pelirrojo haciéndolo caer al suelo.

— Déjalo, él no tiene la culpa, yo lo busqué — Hyunjin se colocó enfrente de Jeongin para ayudarlo a levantarse.

— Es el puto colmo, ¿por qué?, ¿Por qué me hacen esto?, Hwang Hyunjin, ¿por qué no pensaste en mi?, siempre te di lo mejor, ¿por qué?, ¿por qué?, ¿por qué?, Respóndeme!— Entre llanto que nublaba su visión, se acercó al más alto y comenzó a golpear el pecho desnudó de el rubio, el mismo pecho que solía besar cuando hacían el amor entregando sus almas el uno al otro.

O al menos cuando Seungmin entregaba la suya.

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Seungmin, por el amor de satanas, llevas toda la tarde llorando, insultando y maldiciendo, cálmate un poco, créeme que nadie se muere por amor, al final de cuentas hay muchas personas más en esta vida— Habló Minho mientras acariciaba los mechones de cabello de Seungmin, el cual estaba recostando su cabeza sobre los lindos y enormes muslos de este.

—O sea, si, Hyunjin es lindo, guapo, tiene dinero, es inteligente, alto, está bien dotado, y tiene a todos detrás de él, pero créeme que no te merece,  anda, ya deja de llorar, te vas a enfermar si lo sigues haciendo— Soltó una carcajada mientras suspiraba viendo la mueca de furia en la cara de Seungmin.

—Minho, Cierra la boca por favor, te juro que no me ayudas en nada, eres pésimo dando ánimos— exclamó Seungmin con un tono serio.

—Bueno, la forma en la que yo te quería ayudar, no te gustó, así que no te puedes quejar, además, estás invadiendo mi casa, y vienes y me reclamas, eso es el colmo, Minnie lindo— Bromeó mientras le daba leves jalones de cabello al chico.

— Ummh, ¿sabes qué?, estoy empezando a creer en qué tal vez salir, si sea lo mejor— Respondió el de cabello negro mientras suspiraba y cerraba sus ojos.

— Entonces, ¡que no se diga más!, vamos a ponerlos lindos y salgamos, tienes suerte de que la fiesta empiece a las 8 de la noche, así puedes irte a tu casa a alistarte— Habló con un tono algo emocionado y se levantó de la cama dejando a seungmin acostado, el cuál tampoco duró en levantarse dejando la comodidad de aquellas suaves sábanas de terciopelo.

— Ohh!, de verdad me estás corriendo de tu casa, seguro invitaste a ese chico ardilla  para tener un encuentro sexoso— Dijo molestándolo entre risas.

— Cierra la boca, maldito cachoso— Le molesto de vuelta y se echó a reír mientras tomaba a Seungmin de la mano para encaminarlo a la puerta de la casa—

—¡Que rápido se enoja el conejo!— Seungmin dijo entre varias risas salió de la casa por su cuenta mientras veía hacia atrás el rostro sonrojado de Minho.

—Nos vemos a las siete.— Minho azotó la puerta de su casa y tapó su rostro apenado ante las palabras de seungmin, ni siquiera había visto de esa forma a Jisung, pero tampoco era que no quisiese tener un encuentro íntimo con este.