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Ambos jóvenes se encontraban sentados en el sofá en casa del más bajo. Jeon había llegado minutos antes y desde que entró todo había estado en silencio.

Jimin realmente no había pensado en darle la oportunidad de explicarse, pero después de hablar con Seokjin entendió que aquello era lo mejor para todos, pero principalmente para el. Tenía que sanar aquella vieja herida y necesitaba escuchar de Jeon las razones que le llevaron a hacer lo que hizo.

— Te escucho.

Jeon suspiro para armarse de valor y comenzó con su relato explicando porqué había ido al bar aquella noche donde se conocieron. Las dudas que había estado teniendo sobre su sexualidad y el cómo se sintió al verle por primera vez.

— Mi plan jamás fue usarte para definirme. — aclaró. — te dije aquello porque soy un estúpido que no piensa antes de hablar, pero quiero que lo tengas muy en claro. Si me acerqué a ti aquella noche fue porque me hechizaste. Sentía que eras una especie de imán que me atrajo hacia sí. Tu... Me volviste loco de inmediato y solo podía pensar en que quería conocerte más y más. Nunca tuve suficiente de ti.

Jimin asiente en silencios sintiéndose incapaz de hablar aún.

— Tenía muchísimo miedo de mis sentimientos, de lo que despertabas en mi pero al mismo tiempo no podía ni quería estar lejos de ti, por ello las citas a escondidas... No es justificación, pero también me gustaría que te pusieras un poco en mi lugar... Mi familia es súper religiosa y lo que yo sentía por ti iba en contra de todo lo que ellos me habían enseñado. — suspira. — mis tíos echaron a su hija a la calle porque salió del clóset. La repudiaron y la dejaron a la deriva por ser lo que era, yo me asusté tanto que por ello me metí con esa chica y luego te dije todas aquellas cosas.

Para ese punto ambos lloraban. Sus corazones heridos finalmente estaban siendo curados, y todo comenzaba a esclarecer.

— Sé que no estuvo bien hacerte sentir mal por mis miedos, y jamás me perdonaré por perder a la única persona que me ha hecho amar y sentirme vivo. — dice entre lágrimas. — perdóname jimin, sé que soy un asco y no lo merezco, pero lo necesito, mi corazón necesita saber que me has perdonado por haberte herido como lo hice.

— Eres un idiota. — son sus primeras palabras, quita con brusquedad las lágrimas de sus mejillas aunque es inútil, en segundos estás vuelven a tener más lágrimas. — si me lo hubieras dicho en su momento yo te hubiera entendido y jamás te obligaría a salir del clóset. No tenías que haberme hecho eso.

— Lo sé mi amor.

Jeon se arrodilla en el suelo frente a Jimin y lo abraza, sintiendo alivio al ser correspondido por el mas bajo.

— Te perdono Kook.

— Gracias, gracias. Eres un ángel, eres demasiado para este mundo Park Jimin.

— Y Jungkook.

— ¿Si?

— ¿Quieres intentarlo de nuevo?

try again : kookmin (au)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora